LeBron James pasó de ser un niño sin hogar a ser el Mejor de la Historia
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Desde su infancia difícil y con carencias, hasta las predicciones que le cargaron a sus 18 años de edad, LeBron ha cumplido con todas las expectativas
En 1965, Lew Alcindor, antes de ser Kareem Abdul-Jabbar, terminó una brillante carrera en el basquetbol en la escuela secundaria en Nueva York que lo convirtió en la estrella de preparatoria más famosa en ese entonces.
Eligió jugar en UCLA, una escuela en ese momento con expectativas anuales de ganar un campeonato nacional.
Ganó tres títulos con los Bruins, fue nombrado MVP del torneo de la NCAA tres veces y fue dos veces Jugador del Año de Associated Press.
Cumplió con las expectativas y entró en la NBA. Parecía imposible cumplirlos, pero Abdul-Jabbar ganó seis títulos, seis MVP, dos MVP de las Finales y terminó su carrera como el máximo anotador de todos los tiempos de la NBA con 38,387 puntos.
Pero cuando LeBron James superó a Abdul-Jabbar y se convirtió en el líder anotador de la liga poniendo en 38,390 el nuevo récord y al ritmo que va, parece que dejará el récord mucho más difícil de conseguir. Todo eso a pesar de todas las grandes expectativas que tenía sobre sus hombros.
Los pronósticos sobre la carrera de James eran poco realistas y muchas veces injustas. Y, sin embargo, 21 años después de que Sports Illustrated lo pusiera en la portada con el titular “El Elegido”, James ha superado todas esas expectativas.
Las probabilidades no estaban a favor de James desde su nacimiento. Cayó en la categoría llamada niños en riesgo, perdió 83 días de clases en cuarto grado debido a que no tenía hogar y se mudó 10 veces en un año. Hoy, y tal vez por eso la razon de sus fundaciones (LeBron James Family Foundation y su I Promise School), diseñadas para ayudar a niños que tienen las mismas dificultades por las que él pasó.
El miembro del Salón de la Fama, Charles Barkley, ha llamado a James la mejor historia en los deportes.
No sucede a menudo que un joven de 16 años proyectado para ser uno de los más grandes de todos los tiempos termine como uno de los grandes de todos los tiempos, LeBron no es sólo eso, ya es el “GOAT” (Más grande de todos los tiempos) a ojos de las grandes leyendas del basquetbol.
Tiene cuatro MVP de la NBA, cuatro Finales con el premio MVP, 19 selecciones All-Star y 18 selecciones All-NBA, dos medallas de oro en los Juegos Olímpicos, es el número 4 en la lista de asistencias de todos los tiempos, el líder de puntos de playoffs de todos los tiempos, el número 2 de todos los tiempos en asistencias de playoffs, el número 2 de todos los tiempos en puntos de finales y el número 2 de todos los tiempos en asistencias de finales.
Y ahora, está en la cima de la lista de anotadores de todos los tiempos.
James y Abdul-Jabbar no son particularmente cercanos. Abdul-Jabbar ha criticado las posturas de James sobre temas sociales. Cuando se le preguntó antes de la temporada sobre su relación con el ex estelar de los Lakers, James dijo: “Ninguna relación”.
Pero el martes por la noche hubo respeto y aprecio, tal vez el comienzo de una mejor relación, LeBron ya tiene los número para codearse con las leyendas.
Abdul-Jabbar se sentó junto a la cancha y le entregó a James el balón del juego después de que James batiera el récord. Los dos se abrazaron, y las diferencias que habían tenido se derritieron. Abdul-Jabbar se mostró amable después del partido.
“Lo que LeBron ha hecho fuera de la cancha es más importante que lo que ha hecho en la cancha”, dijo Abdul-Jabbar. “Mantiene a los niños en la escuela. Ha brindado liderazgo y un ejemplo de cómo vivir”.
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James llamó a Abdul-Jabbar por su apodo, “Cap” (capitán) durante la ceremonia del juego.
“Poder estar en presencia de una leyenda tan grande como Kareem, es una lección de humildad”, dijo James.
De diferentes lugares y épocas y con diferentes perspectivas, se ubicaron en la cancha central como los dos mejores anotadores en la historia de la NBA, jugadores que superaron las expectativas para convertirse en dos de los mejores jugadores en la historia del baloncesto. Aunque LeBron ya está arriba, así lo dicen las estadísticas.
