Para muchos, jugar su primer Pro Bowl es especial: ese es el caso de Justin Herbert

El mariscal de campo de los Chargers, Justin Herbert, estaba en el vestidor cuando el profundo Derwin James le dio la noticia. Herbert iría a su primer Pro Bowl.

“¿Es oficial?”, Herbert le preguntó a James a fines de diciembre.

No solo fue oficial. Fue histórico. Herbert se convirtió en el primer mariscal de campo de los Chargers en ser seleccionado como titular de Pro Bowl desde Dan Fouts en 1983, un lapso de 38 años.

“Siempre fui un gran fanático de Dan Fouts, así que es genial escuchar eso”, comentó Herbert a los periodistas. “Nos enviamos mensajes de texto de vez en cuando. Simplemente es un gran tipo, y aprendí mucho de él”.

Herbert se encuentra entre las 48 selecciones de primera vez para el Pro Bowl de este año, que es la tercera mayor cantidad en una sola temporada. El juego se llevará a cabo el domingo en Las Vegas. Los jugadores fueron seleccionados por una combinación de aficionados, jugadores y entrenadores.

Ascendiendo rápidamente para ser uno de los mejores pasadores de la liga, Herbert estableció un récord de la NFL por la mayor cantidad de pases de touchdown en sus dos primeras temporadas en la NFL con 69. También se convirtió en el noveno en lanzar para 5 mil yardas en una campaña.

Herbert, sexta selección global en el draft de 2020, dijo que nunca pensó en vencer a algunos de los mejores mariscales de campo de la liga para convertirse en el titular de Pro Bowl de la AFC.

“Mis prioridades en ese momento eran entender la ofensiva donde quiera que fuera, aprender eso y sincronizarme con los receptores, y lo que sea que suceda después de eso”, explicó Herbert. “Todo lo que podía controlar era mi esfuerzo y mi actitud, y sucederán cosas buenas si te esfuerzas. Es gracioso cómo han funcionado las cosas en los últimos 2 años, pero no cambiaría nada”.

Herbert regresa al Allegiant Stadium, donde sus esperanzas de llegar a los playoffs terminaron en una derrota por 35-32 en tiempo extra ante los Raiders el 10 de enero.

Si bien algunos jugadores, especialmente aquellos que han sido seleccionados para múltiples Pro Bowls, pueden tomar el juego de manera más casual, o incluso optar por no jugar, muchos de los jugadores primerizos consideran que es un honor y la realización de una meta profesional. Existen muchas historias y la de Justin es sólo una de tantas.