Ella es Cinthia Ramírez, mujer de origen mexicano, maestra artillera y clave en el ejército de EU
COMPARTIR
Crecer en la milicia no fue un trabajo sencillo para la joven
Washington.- Cinthia Ramírez, una sargento del Ejército de Estados Unidos de origen mexicano, se ha convertido en la primera mujer del país especializada en un poderoso tanque de guerra.
A sus 23 años es activo en la fuerza militar y graduada como maestra artillera del Abrams M1A2, el cual es un vehículo blindado de 8 metros de largo, 3.5 metros de ancho y 2.45 metros de altura, que pesa unas 67 toneladas y tiene un costo de unos 9 millones de dólares.
Ramírez, nacida en Plainview (Texas) y con raíces mexicanas por parte de su madre, compartió en una entrevista para la agencia internacional EFE, que recientemente se graduó de un curso importante.
Explicó que “muy intensivo con una tasa de graduación de 33%” y con al menos “una semana de instrucción en el terreno”.
Aunado a esta dificultad también mencionó que la etapa inicial fue dura, al tener que plantearlo a su familia, en la que no hay otros militares.
“Mi familia no quería que yo estuviese en la infantería” menciona en la entrevista.
SU INICIO
La sargento detalló que ingresó al Ejército estadounidense cuando tenía 18 años debido a que esa edad no sabía que quería hacer de su vida. “No tenía una dirección a tomar en la universidad”, declaró.
Al incorporarse fue encontrando poco a poco su motivación.
“El oficial de reclutamiento me sugirió que fuera una ‘tanquera’”, subraya.
Cuando llegó a las fuerzas armadas comenzó su instrucción básica en Fort Benning, Georgia; tiempo después y después prestó servicio como conductora de vehículos en Fort Hood, Texas y realizó un turno de rotación en Corea del Sur en 2019.
Actualmente está asignada a la Compañía Avenger, en el Batallón 1, Regimiento de Caballería 12, de la Primera División de Caballería.
“Es empoderante”, comenta la sargento sobre su labor y el vehículo del que está a cargo. “Y (el tanque) es una plataforma compleja”.
MAESTRA EN EL EJÉRCITO
La joven explicó que la denominación de su tarea es “tanquera” y la capacitación más reciente que tuvo fue de “maestro artillero”.
La labor que tiene Cinthia Ramírez es casi exclusiva, ya que muy pocas personas cuentan con el conocimoento de cómo operan todos los sistemas del tanque. “Si algo funciona mal en el tanque, yo soy quien debe saber la respuesta”, dijo.
Ahora está enfocada en su encargo, pero no descarta desplazarse a donde sea. Ella asegura que busca servir 20 años en el Ejército y que ha puesto la mira al curso de instructora militar.
UN EJEMPLO PARA LAS MUJERES
Ramírez está consciente que su dedicación podría convertirse en una enseñanza para futuras mujeres soldados, por lo que compartió un consejos para quienes buscan seguir este camino.
“No escuches lo negativo. Incluso si fallas, te levantarás y seguirás perseverando por lo que quieres”, enfatizó.
Con información de EFE.
