Los Castro y Daniel Ortega tuvieron lazos con Pablo Escobar, afirman

BOGOTA.- Uno de los pocos ex integrantes del cártel de Medellín que sigue en prisión, John Jairo Velásquez, afirmó hoy que el máximo jefe de la banda, Pablo Escobar, tuvo vínculos con los hermanos cubanos Fidel y Raúl Castro, el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, y el ex dictador panameño Manuel Antonio Noriega.

Las afirmaciones fueron hechas por Velásquez, más conocido con el alias de Popeye, en una entrevista que concedió al director de la cadena radial RCN, Francisco Santos, a quien de paso pidió perdón por haber sido secuestrado por el cartel de Medellín en la época en que esa banda mantenía una guerra terrorista contra el Estado colombiano.

Popeye, que purga una condena de 20 años de prisión por elasesinato de Luis Carlos Galán, cometido en 1989 cuando éste era favorito para ganar las elecciones presidenciales de 1990, se refirió a diversos temas, entre ellos los nexos de Escobar con políticos colombianos y latinoamericanos.

El tinglado

Según el reo, el ex presidente colombiano Alfonso López Michelsen, que gobernó de 1974 a 1978 y falleció en 2007, "siempre protegió" al cartel de Medellín y se comunicaba con Escobar a través del ex ministro y ex senador Alberto Santofimio, condenado a 24 años de cárcel por el asesinato de Galán.

El plan de Escobar, abatido en 1993 en una operación policial, era convertir a Santofimio en presidente para ganar poder político, dijo Popeye desde la cárcel de Cómbita, en el centro del país.

"Él (Escobar) estuvo muy cerca de Alfonso López Michelsen. Siempre le enviaba las razones con Alberto Santofimio Botero, porque no se reunían muy a menudo", señaló.

Al referirse a políticos de otros países que supuestamente tuvieron vínculos con Escobar, Popeye mencionó a Ortega, a los hermanos Castro y a Noriega, recientemente extraditado de Francia a Panamá.

Noriega, un perro miserable

Según el ex narcotraficante, Noriega recibía dinero del cartel para que protegiera a narcotraficantes colombianos.

"Noriega los protegía a ellos allá, le daban dinero y él los protegía en Panamá", aseguró.

"(Noriega es) el perro miserable de Centroamérica. Es peor porquería que Pablo Escobar, que cualquier asesino de nosotros", afirmó.

Ortega financió la revolución con dinero sucio

Asimismo, catalogó a Ortega de "narcotraficante", tras asegurar que colaboró en el envío de cargamentos de cocaína a Estados Unidos.

"Para mí el presidente Ortega es un corrupto narcotraficante que en esa época utilizó el dinero de la mafia, porque de las pistas de Managua salían cargamentos de droga hacia Miami. Ellos cogieron dinero del narcotráfico para hacer su revolución y el dinero que deba tener hoy en día el señor Daniel Ortega es del narcotráfico", expresó.

Contacto directo con los Castro

Al referirse a los vínculos de su antiguo jefe con Cuba, Popeye señaló que Escobar mantenía contactos con Fidel Castro.

"El patrón tenía contacto directo con Fidel Castro. Yo una vez llevé una carta muy gruesa a México, para entregársela al Nobel de Literatura, Gabo (Gabriel García Márquez). Se la entregué yo mismo, no iba destapada. Yo no la leí, pero era para Fidel", aseguró.

"La droga no podía llegar en aviones de Colombia y era una ruta más costosa, pero llegaba a México en barcos y de ahí en aviones pequeños llegaba a la isla a pistas militares porque Raúl (Castro) era el jefe del Ejército y de ahí en lanchas rápidas a Cayo Hueso y la escondíamos en Boca Ratón, que es uno de los barrios de lujo de Miami", dijo.

Popeye se refirió a varios de los atentados cometidos por el cartel de Medellín y recordó el episodio en que Santos fue secuestrado (1990), con el cual se buscaba atacar a familias acaudaladas para que los capos de la mafia no fueran extraditados a Estados Unidos.

Santos trabajaba en el diario El Tiempo de Bogotá, que en esa época pertenecía a su familia. Entre 2002 y 2010 fue vicepresidente de Colombia durante el gobierno de Alvaro Uribe y hace varios meses regresó al periodismo como director de noticias de RCN.

Velásquez, que saldrá de la cárcel a mediados de 2013, dijo que quiere vivir en Costa Rica o México, pero no descartó que se quede en Colombia y que se proteja con armas que aún conserva.