Buscan en Los Angeles a asesino en serie
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Todas las víctimas son negras y fueron halladas en el sur de Los Angeles o sus cercanías. La policía cree que algunas de las mujeres eran prostitutas
Los Angeles, EU.- Las autoridades confían en que una nueva recompensa de medio millón de dólares les ayude a capturar a un asesino compulsivo que ha matado a por lo menos diez mujeres y un hombre en más de dos décadas.
Todas las víctimas son negras y fueron halladas en el sur de Los Angeles o sus cercanías. La policía cree que algunas de las mujeres eran prostitutas.
Siete mujeres y un hombre cayeron baleados por la misma pistola en un período de tres años a partir de agosto de 1985. Las mujeres habían sido abusadas sexualmente y sus cadáveres fueron arrojados por lo general en la misma callejuela en el sur de Los Angeles.
La municipalidad de Los Angeles aprobó el miércoles la recompensa propuesta por el concejal Bernard Parks, quien como jefe de policía en el 2001 ordenó al departamento revisar una serie de casos no resueltos.
Alicia Monique Alexander es la última víctima conocida en la primera serie de asesinatos. Porter Alexander vio por última vez a su hija en septiembre de 1988 cuando la muchacha de 18 años salió a hacer una compra en un comercio.
Cuatro días después la policía llamó a la puerta de la casa familiar. Habían hallado el cuerpo de la muchacha en una callejuela cercana con una herida de bala en el pecho.
Pasaron 13 años desde la muerte de Alexander, dijo la policía, y los investigadores se retiraron o pasaron a otros casos.
La pausa concluyó en marzo del 2002 cuando el cadáver de Princess Berthomieux, de 14 años, apareció golpeado y estrangulado en una callejuela en la ciudad de Inglewood. Muestras de ADN vincularon el caso al sospechoso en los asesinatos anteriores.
Otro asesinato se produjo en el 2003 y el homicidio más reciente data de enero del 2007 cuando se halló el cadáver de Janecia Peters, de 25 años, cubierta por una bolsa de basura.
El tiempo que ha pasado entre los asesinatos hizo que un semanario de Los Angeles, que dio la primicia, calificara al asesino como el "Durmiente nefasto".