Brasil tendría más de 300 mil infectados de coronavirus no identificados
Expertos en Brasil indican que el número de contagiados de la COVID-19 podría ser 15 veces mayor al que se muestra en los datos oficiales. Hasta el momento se reportaron 29.015 casos positivos
En Brasil la situación por la pandemia de la COVID-19 podría empeorar en las próximas semanas. Unos investigadores advirtieron que la cifra actual de infectados no sería precisa, pues habrían más de 300.000 contagiados no identificados. Temen una posible hecatombe.
Los expertos vaticinan este complicado escenario en los días en que Jair Bolsonaro, presidente de Brasil, protagoniza una serie de divergencias con el ministro de Salud, Luiz Enrique Mandetta, quien es la principal pieza en la lucha contra el coronavirus.
Según uno de los médicos que conforman el grupo COVID-19 Brasil se debe aplicar el muestreo masivo para detectar a los miles de contagiados.
“Brasil está en una posición muy mala y solo podemos resolver el problema con una detección masiva”, dijo a Domingos Alves, miembro del grupo mencionado y jefe del Laboratorio de Inteligencia en Salud (LIS) de la Universidad de Sao Paulo (USP).
El grupo de investigadores, donde también hay universitarios, presume que los más de 20.000 infectados detectados son parte de una cifra inexacta. Estiman que Brasil tiene un total de 313.888 portadores en sus calles sin haber sido identificados, lo cual, representa un incremento de 15 veces al balance mostrado por el Ministerio de Salud de ese país el último miércoles 15 de abril.
“Las cifras oficiales muestran dónde estuvo la epidemia hace una o dos semanas”, explica Domingo Alves. Solo hace una semana el secretario de Vigilancia y Salud del ministerio, Wanderson de Oliveria, indicó que “el 85 % de asintomáticos nunca serán detectados”.
Las cifras oficiales en Brasil por la pandemia de la COVID-19 es de 29.015 infectados y 1.760 muertos. El presidente Jair Bolsonaro tendría en sus manos la decisión de amplificar las pruebas de descarte para evitar que el país sea el epicentro de una hecatombe.