Congreso salvadoreño da luz verde para que Nayib Bukele pueda reelegirse de forma indefinida

SAN SALVADOR- El Congreso de El Salvador, que está controlado por el partido del presidente Nayib Bukele Nuevas Ideas. avaló las reformas a la Constitución que dan luz verde a la reelección presidencial indefinida y con las que se extiende el mandato presidencial de cinco a seis años.

Ana Figueroa, quien es diputada de Nuevas Ideas, presentó la iniciativa con la que se pretendía reformar cinco artículos de la Constitución con el propósito de posibilitar la reelección presidencial sin límites, así como extender el periodo presidencial, además de eliminar la segunda vuelta electoral y reducir el periodo presidencial actual.

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Al ser mayoría, esta iniciativa fue respaldada por 57 diputados del partido oficialista Nuevas Ideas de los 60 que conforman el Congreso.

Por su parte, los dos diputados de la derechista Alianza Republicana Nacionalista (Arena), así como la diputada del conservador partido VAMOS emitieron su voto en contra.

Figueroa arguyó que la reelección indefinida ha existido históricamente en El Salvador “para casi todos los cargos de elección popular sin prohibiciones; alcaldes se pueden reelegir cuantas veces ellos quieran, y los diputados”.

“Todos han tenido la posibilidad de ser reelectos mediante el voto popular, la única excepción hasta el momento ha sido la presidencia de la República”, añadió la diputada de Nuevas Ideas.

Promueve también, prosigue Figueroa “eliminar todo lo concerniente a la segunda vuelta electoral, para que se consideren electos como presidente y vicepresidente de la República los candidatos que hayan obtenido el mayor número de votos válidos en el correspondiente proceso electoral”.

Así también los legisladores respaldaron una disposición transitoria para que el más actual período presidencial de Bukele, mismo que inició el 1 de junio de 2024 y concluye el 1 de junio de 2029, finalice de manera anticipada, el 1 de junio de 2027, con el objetivo de unificar las elecciones presidenciales, legislativas y municipales.

Esta disposición transitoria que precisa esa última fecha electoral que daría la posibilidad al empresario, que está en el poder desde 2019, de postule para otro periodo presidencial.

Esta ratificación acata el mandato constitucional que se aprobó en abril de 2024, cuando se avaló realizar un cambio en el artículo 248 de la Carta Magna salvadoreña para simplificar reformas constitucionales sin que sea necesario de tener que esperar a la siguiente legislatura.

En la Constitución vigente desde 1983 se incorporó como requisito para modificar la Carta Magna que la reforma debía de ser ratificada en el Congreso posterior. Esto quiere decir, que la reforma constitucional deberá enviarse y aprobarse en una legislatura, yd deberá de ratificarse en la siguiente, después de elecciones.

Sin embargo, con la modificación se posibilitará hacer un cambio en el texto constitucional en una sola legislatura con 45 de los 60 votos, es decir, tres cuartas partes, en una sola sesión plenaria. La reforma va a quedar vigente ocho días después de que haya sido publicada en el Diario Oficial.

En opinión de la diputada Marcela Villatoro, de Arena “la situación de esta noche es tan grave que ustedes no se dan cuenta lo que trae una reelección indefinida: trae acumulación de poder y debilita la democracia (...) existe corrupción y clientelismo porque aumenta el nepotismo y se frena la democracia y la participación política”, y aseveró que″¡ha muerto la democracia en El Salvador!”.

Por lo contrario, la diputada Suecy Callejas de Nuevas Ideas, quien es la vicepresidenta del Congreso, expresó “hoy estamos haciendo historia: el poder ha regresado al único lugar al que verdaderamente pertenece... al pueblo salvadoreño”.

”Las cuatro reformas constitucionales que presentamos hoy no son una imposición, son una elección. Una elección libre, soberana y legítima, tomada por quienes siempre debieron tener la última palabra: el pueblo”, concluyó Callejas.

ACTIVISTAS, WOLA y HUMAN RIGHTS WATCHS EN ALERTA

Tras darse a conocer la decisión tomada por el Congreso salvadoreño, la Oficina en Washington de Asuntos Latinoamericanos (WOLA) censuró lo que considera “una flagrante manipulación de la constitución de El Salvador»”, que “elimina los límites al mandato presidencial, otorgando a Bukele reelecciones ilimitadas y mandatos de 6 años”.

“Aquí es donde años de manipulación constitucional gradual conducen: al desmantelamiento de la democracia”, apuntó WOLA en un mensaje en X.

En este sentido, Juanita Goebertus, quien es la directora de la División de las Américas de Human Rights Watch (HRW), indicó que el partido oficialista Nuevas Ideas, de Bukele, “está recorriendo el mismo camino que Venezuela” al avalar una reforma constitucional que da luz verde a la reelección presidencial indefinida.

“El partido de Bukele impulsa una reforma constitucional exprés para permitir la reelección presidencial indefinida. Están recorriendo el mismo camino que Venezuela. Empieza con un líder que usa su popularidad para concentrar poder, y termina en dictadura”, escribió Goebertus en su cuenta de la red social X.

Por su parte, el abogado Manuel Zometa indicó en una entrevista que concedió a un canal de televisión local, que con la reforma “se ha roto la Constitución” y a su vez opinó que la Carta Magna “dejó de ser fundamental para volverse una ley secundaria más que se estará reformando al antojo de unos pocos”.

“Lo que sucede en este país es que el poder hegemónico se está desbordando y no tenemos la protección de la Constitución (...) lo sucedido no tiene un esquema o una característica democrática, es, por definición, una autocracia electoral y está en vías de convertirse en un esquema autoritario”, acotó Zometa.

También la activista Celia Medrano, que fue aspirante en 2024 a la Vicepresidencia por el partido Movimiento Sumar y además candidata para ocupar la Secretaría Ejecutiva de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), aseveró que “no es una sorpresa” la reforma aprobada.

“Para quienes aún dudaban sobre el objetivo de perpetuarse indefinidamente en el poder del actual gobernante, ahora no cabe ninguna duda de ello”, señaló Medrano en declaraciones compartidas a la Agencia de Noticias EFE.

Asimismo, la opositora precisó que tanto desde el periodismo crítico como de las organizaciones de derechos humanos “se advirtió en varias ocasiones que ese (la perpetuidad de Bukele en el poder) era el objetivo”.

“No fueron escuchados desde una comunidad internacional complaciente y han sido criminalizados (periodista y activistas) y perseguidos desde un régimen autoritario que se ha consolidado”, detalló Medrano.

Por lo que la activista concluyó que “hablar de apoyo popular en un país que ha cerrado los espacios cívicos y donde seis de cada diez salvadoreños manifiesta temor de expresar su opinión sobre el gobierno, no es más que una ficción».

A través de un comunicado la organización civil Acción Ciudadana señala que “permitir la reelección presidencial indefinida y alargar el período de ejercicio del cargo no busca dar poder al pueblo, o ahorrar fondos públicos, por el contrario, su objetivo real es perpetuar al presidente en el poder”.

“El camino que ha tomado El Salvador es similar al que siguieron Nicaragua y Venezuela, naciones que hoy en día son dictaduras”, advierte la organización.

Con información de las Agencias de Noticias The Associated Press, AFP y EFE.