“Juramento del secreto” personal laico del Vaticano estará aislado durante el cónclave
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Quienes rompan el juramento de confidencialidad serán excomulgados del Vaticano para siempre
En la víspera del cónclave, se reportó cómo la administración del Vaticano coordina con el personal laico de las instalaciones.
Todos aquellos, pertenecientes a las áreas laborales de limpiadores, cocineros, doctores, enfermeras, conductores y operadores de ascensores, debió prestar juramento de secreto, este 5 de mayo.
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Sin importar las creencias religiosas del personal asistente, ellos debieron mantener los estatutos de confidencialidad interina del Vaticano.
El portavoz del Vaticano, Matteo Bruni, informó que alrededor de 100 personas asignadas al cónclave prestaron su juramento en la capilla Paulina del Vaticano.
Quienes rompen el juramento, recibirán una excomunión automática. Esto fue reafirmado por el anterior Papa Benedicto XVI.
El juramento del secreto expresa lo siguiente:
‘Prometo y juro que, a menos que reciba una facultad especial otorgada expresamente por el pontífice recién elegido o por sus sucesores, guardaré absoluto y perpetuo secreto con todos los que no formen parte del Colegio de Cardenales electores en relación con todos los asuntos directa o indirectamente relacionados con los votos emitidos y su escrutinio para la elección del sumo pontífice’
‘Del mismo modo, prometo y juro abstenerme de usar cualquier equipo de audio o video capaz de grabar cualquier cosa que ocurra durante el período de la elección dentro de Ciudad del Vaticano, y en particular cualquier cosa que de alguna manera, directa o indirectamente, esté relacionada con el proceso de la elección misma’
‘Tomo este juramento plenamente consciente de que una infracción del mismo incurrirá en la pena de excomunión automática reservada a la Sede Apostólica. Que Dios y estos Santos Evangelios, que toco con mi mano, me ayuden’
Por su parte, los cardenales prestarán su juramento el 7 de mayo en la Capilla Sixtina, previamente a la primera votación. Se estima la participación de 133 cardenales.
Para atender las necesidades de los participantes del conclave, las y los trabajadores del Vaticano se mantendrán aisladas del exterior del espacio selecto de la Santa Sede; esto no solo para labores de limpieza y comida, sino también para atenciones médicas.
TECNOLOGÍA Y CÓNCLAVE
Aunque se prevé la presencia de alta de seguridad durante el cónclave, se informó, por parte de Bruni, que el uso de celulares por parte de los asistentes será limitada. No solo por cuestiones de confidencialidad y seguridad, sino porque atribuye a la ceremonia del conclave, algo vinculado a “oración” y a la “meditación”.
Explicó que los teléfonos se mantendrán en la residencia del Vaticano, Santa Marta. Posteriormente, serán devueltos hasta la finalización del cónclave.
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Presuntamente, la administración del Vaticano utilizará inhibidores de señal en los alrededores de la Capilla Sixtina y en la residencia de los cardenales. La policía militar del Vaticano, también conocida como Gendarmería, serán los encargados de la supervisión.