Obama, Bush, Clinton y Carter exhortan a vacunarse contra el COVID-19
COMPARTIR
Los expresidentes de EU Barack Obama, George W. Bush, Bill Clinton y Jimmy Carter están exhortando a los ciudadanos a que se vacunen contra el COVID-19 como parte de la iniciativa del Ad Council y la COVID Collaborative.
Cuatro expresidentes de Estados Unidos están exhortando a los ciudadanos a que se vacunen contra el COVID-19 cuando les sea posible, como parte de una campaña para superar las dudas sobre el tratamiento.
Barack Obama, George W. Bush, Bill Clinton y Jimmy Carter, así como a las primeras damas Michelle Obama, Laura Bush, Hillary Clinton y Rosalynn Carter. Todos han recibido sus vacunas para el coronavirus.
Los anuncios son iniciativa del Ad Council y la COVID Collaborative, que es apoyada por empresas.
En el espacio de 60 segundos, Clinton, de 74 años, dice que una vez que acabe la pandemia quiere “volver al trabajo y poder moverme”. Obama, de 59 años, dice que quiere poder visitar a su suegra para “abrazarla y verla en su cumpleaños”. Bush, de 74, habla de “ir al partido de apertura de los Texas Rangers con el estadio lleno”.
Carter, de 96 años, dice que se vacunó para ayudar a poner fin a la pandemia “lo antes posible”.
El video presenta fotos de los exmandatarios y sus cónyuges con jeringas en la parte superior del brazo mientras instan a los estadounidenses a “arremangarse y hacer su parte”.
El expresidente Donald Trump y su esposa, Melania, no aparecen en la campaña. El republicano todavía estaba en el cargo cuando comenzó el proyecto en diciembre, según el Ad Council, y no asistió a la toma de posesión del presidente Joe Biden el 20 de enero, cuando Obama, Bush y Clinton se reunieron en persona para filmar. Un asesor de Trump reveló la semana pasada que los Trump fueron vacunados en privado antes de salir de la Casa Blanca el día de la inauguración.
Los anuncios se difundieron mientras sigue creciendo el suministro de vacunas contra el coronavirus en Estados Unidos y mientras los expertos en salud pública se preocupan de que algunos estadounidenses no quieren vacunarse, lo que retrasaría el camino del país hacia la “inmunidad colectiva”.