Papa Francisco acepta renuncia de un controvertido obispo acusado de abuso sexual

Internacional
/ 20 julio 2018

Antiguos seminaristas habían acusado al obispo hondureño Juan José Pineda, de 57 años, de conductas sexuales inapropiadas

CIUDAD DEL VATICANO.-  El papa Francisco aceptó el viernes la renuncia de un obispo hondureño acusado de faltas sexuales con seminaristas, el más reciente de una serie de jerarcas de la Iglesia implicados en problemas de conducta sexual con adultos bajo su autoridad.

Francisco había ordenado investigar las denuncias contra el obispo auxiliar de Tegucigalpa, Juan José Pineda Fasquelle, el año pasado. El viernes aceptó su renuncia, informó el Vaticano.

No se dieron explicaciones. A sus 57 años, Pineda está lejos de la edad de retiro normal de los obispos, de 75 años.

Pineda era el principal auxiliar del cardenal Oscar Rodríguez Maradiaga, uno de los principales asesores del papa, y su caída significa un golpe para el arzobispo hondureño.

Maradiaga frecuentemente dejaba la arquidiócesis en manos de Pineda debido a sus obligaciones como miembro del círculo íntimo de asesores del papa. Además, sus problemas de salud le obligaban a buscar atención médica en el exterior.

La investigación del Vaticano se había concentrado tanto en las denuncias de la conducta sexual de Pineda como las acusaciones de malversación de fondos contra Maradiaga.

Francisco ha aceptado la declaración de inocencia de Maradiaga.

Según informes en el semanario italiano L'Espresso, se sabía que Pineda mantenía relaciones íntimas con varios hombres, a algunos de los cuales trataba como favoritos y les hacía regalos. Varios seminaristas lo denunciaron por sus intentos de seducirlos.

Últimamente varios prelados han sido sancionados por mantener relaciones sexuales con adultos bajo su autoridad.

El caso más reciente es el de Theodore McCarrick, un respetado cardenal estadounidense, quien fue suspendido de los oficios públicos ante revelaciones de que abusó sexualmente tanto de menores como adultos.

El arzobispo de París sancionó recientemente a un conocido sacerdote y psicoterapeuta después que varios pacientes lo acusaron de actos sexuales durante la terapia. El reverendo Tony Anatrella era considerado un especialista en homosexualidad y estudios de género, y dos oficinas del Vaticano lo empleaban como asesor. Ha apelado la orden de desistir de los oficios públicos.

En Chile, donde los 31 obispos en actividad presentaron sus renuncias por el mal manejo de los casos de abuso sexual de menores, últimamente se ha revelado la existencia de redes de sacerdotes homosexuales y los obispos cómplices que los encubrían.

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