Va la deuda de Estados Unidos rumbo a un monto histórico: 19 bdd
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Advierte el Congreso por creciente costo de intereses, pago de pensiones y atención a los veteranos
Mientras las diferencias entre republicanos y demócratas continúan y la calificadora Fitch Ratings redujo la nota de Estados Unidos de AAA a AA+, la deuda pública estadounidense va rumbo a alcanzar los 19 billones de dólares para el 2033.
De acuerdo con proyecciones de la Oficina de Presupuesto del Congreso (CBO, por sus siglas en inglés), la deuda se incrementará en 3 billones más de lo previsto debido al aumento de los costos de los pagos de intereses, la atención médica de los veteranos, y los beneficios para jubilados y el Ejército.
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Durante los siguientes 10 años, los déficits promediarán 2 billones anuales a medida que los ingresos fiscales no sigan el ritmo de los crecientes costos de los beneficios del Seguro Social y Medicare para los “baby boomers” que se jubilan.
Para poner esos números en contexto, la cantidad total de deuda en manos del público será igual a la producción anual total de la economía de Estados Unidos en 2024, aumentando al 118% de la economía para el 2033.
El CBO proyecta que la economía de Estados Unidos apenas crecerá este año, después de ajustar la inflación, y que la tasa de desempleo aumentará por encima del 5%, antes de que el crecimiento se vuelva a acelerar el próximo año. Atribuye la desaceleración del crecimiento a la campaña de la Reserva Federal para controlar la inflación mediante el aumento de las tasas de interés, que tiene como objetivo enfriar la economía y el mercado laboral.
Las proyecciones actualizadas podrían sobrecargar un debate partidista entre el presidente Biden y los republicanos sobre impuestos, gastos y el límite de deuda de la nación.
Los legisladores republicanos se niegan a elevar el límite, que topa la cantidad total de dinero que el Gobierno federal está autorizado a pedir prestado para cumplir con sus obligaciones financieras, a menos que Biden acepte recortes de gastos pronunciados pero no especificados. Biden ha dicho repetidamente que no negociará sobre el aumento del límite de endeudamiento, que simplemente permite al Gobierno pagar los gastos que el Congreso ya ha autorizado.
La resistencia republicana a elevar el límite amenaza con desencadenar una crisis financiera y una recesión si el Gobierno no puede pagar todas sus cuentas a tiempo.
Debido a lo anterior fue que a inicios de agosto Fitch Ratings decidió rebajar la calificación crediticia de EU ante su creciente deuda pública a nivel federal, estatal y local, y por el “deterioro constante de los estándares de gobernanza” en las últimas dos décadas.
Este último factor se refiere a la creciente polarización política y los repetidos estancamientos en Washington en torno al gasto y los impuestos, lo que está costando caro a los contribuyentes estadounidenses por la elevación de las tasas de interés y los costos del endeudamiento.
Fitch había advertido el 24 de mayo que podría retirar la calificación de triple A del Gobierno mientras el Congreso volvía a batallar para elevar el límite de deuda. Casi una semana después se alcanzó un acuerdo que suspendió el límite y recortó alrededor de 1.5 billones de dólares del déficit del Gobierno en la próxima década.
Con información de medios