Verificamos los argumentos de Trump sobre el caso Epstein
COMPARTIR
Desde que asumió el cargo, altos funcionarios del Departamento de Justicia habían prometido liberar documentos reveladores sobre Epstein
Por Linda Qiu y Jamie Leventhal
El presidente Donald Trump lleva semanas enfrentando el descontento cada vez mayor de algunos de sus partidarios más leales por la manera en que su gobierno ha manejado el asunto de los archivos de Jeffrey Epstein.
Desde que asumió el cargo, altos funcionarios del Departamento de Justicia habían prometido liberar documentos reveladores sobre Epstein, un delincuente sexual registrado que estaba a la espera de un juicio por cargos de tráfico sexual antes de su muerte en una celda de Manhattan en 2019.
TE PUEDE INTERESAR: Arriesga a industria fórmula de gas LP del Gobierno de Sheinbaum
Sin embargo, la agencia dio marcha atrás en julio, afirmando que “no sería apropiado ni estaría justificado revelar más información” y descartando las teorías de que Epstein conservaba una lista de clientes prominentes a quienes había proporcionado mujeres jóvenes. Ese giro de 180 grados provocó la ira y la incredulidad de los partidarios de Trump, a quienes el caso ha cautivado durante mucho tiempo.
Aunque el propio Trump se relacionó con Epstein décadas antes, se distanciaron en la década de 2000 y no hay pruebas públicas de que el presidente hubiera estado involucrado en ninguna de las actividades ilegales de Epstein.
No obstante, Trump ha hecho caso omiso de las preguntas sobre Epstein y las consecuencias posteriores. Ha descartado el asunto diciendo que se trataba de “un engaño”, sin dar más detalles. Y ha intentado desviar la atención hacia otros muchos temas. Pero en algunas ocasiones, el presidente sí respondió a las preguntas sobre los archivos, su relación con Epstein y la manera en que ha manejado el asunto.
Esta es una evaluación de algunas de sus defensas.
Atacar a sus adversarios políticos
“Yo diría que, ya sabes, estos archivos los inventó Comey. Los inventó Obama. Los inventó [el gobierno de] Biden”.
— En declaraciones del 15 de julio
Falso. Las diversas investigaciones sobre Epstein no se produjeron bajo los mandatos de James Comey, el director del FBI, del presidente Barack Obama ni del presidente Joe Biden. Además, no está muy claro qué quiso decir Trump al decir que los archivos fueron “inventados” por Comey y los predecesores demócratas de Trump. Sin embargo, el Departamento de Justicia, al negarse a divulgar archivos adicionales, declaró en un memorando sin firma el mes pasado que el gobierno federal poseía un cúmulo de material —300 gigabytes de registros y evidencias físicas— relacionado con las investigaciones.
Cuando se pidieron pruebas de la afirmación de que los archivos eran falsos, un funcionario de la Casa Blanca no ofreció ninguna, y solo dijo que los supuestos rivales de Trump habían demostrado estar dispuestos a perseguir al presidente bajo pretextos falsos.
La policía local de Florida empezó a investigar a Epstein en 2005 y remitió el caso al FBI un año después. En 2007, la fiscalía del distrito sur de Florida, encabezada por R. Alexander Acosta —quien más tarde fue el primer secretario de Trabajo de Trump—, acordó lo que se conoce como un acuerdo de no enjuiciamiento. En virtud del acuerdo, Acosta no presentaría cargos federales por tráfico sexual y Epstein se declaró culpable de cargos estatales menores por solicitar la prostitución de una menor.
En febrero de 2019, más de una década después, el Departamento de Justicia anunció que abriría una investigación sobre el acuerdo. Los fiscales federales acusaron a Epstein de cargos de tráfico sexual en julio de 2019 y un mes después fue hallado muerto en su celda de la cárcel; las autoridades dictaminaron que se trataba de un suicidio.
Esas investigaciones se llevaron a cabo durante la presidencia de George W. Bush y el primer mandato de Trump, no con Obama, Biden o Comey, quien fuera director del FBI de 2013 a 2017. Y muchos de los documentos relacionados con esos hechos ya se han hecho públicos a lo largo de 15 años, incluso durante el primer mandato de Trump. Las cosas que han ocurrido después no concuerdan con su afirmación de que los archivos fueron “inventados”.
Las demandas presentadas por las víctimas de Epstein y el interés público por el caso, generado en parte por una investigación de The Miami Herald sobre el acuerdo de no enjuiciamiento, desembocaron en la publicación de miles de documentos.
En 2009, un juez desclasificó el acuerdo de no enjuiciamiento. En 2015, otro juez ordenó la publicación de más documentos. En 2018, el FBI empezó a publicar archivos sumamente editados relacionados con su investigación sobre Epstein. The Miami Herald, en su investigación de 2018, obtuvo y analizó 10 años de registros públicos, de departamentos de policía, el Departamento Correccional de Florida, la fiscalía del estado, el FBI y el Departamento de Justicia. En enero de 2024, un juez federal de Manhattan divulgó aún más documentos, que incluían nombres de víctimas, asociados y amigos de Epstein.
“Deberían estar hablando de Bill Clinton, que fue a la isla 28 veces. Yo nunca fui a la isla”.— En declaraciones del 25 de julio
Sin evidencias. No hay pruebas de que Clinton hiciera 28 visitas a las Islas Vírgenes, donde Epstein recibía a sus amigos y donde fue acusado de traficar con chicas menores de edad. Lo más probable es que Trump se refiriera a los registros de vuelo que muestran que Clinton viajó en el avión de Epstein a otros lugares del mundo, no a las Islas Vírgenes. Y esos mismos registros también muestran que Trump viajó en el avión.
Registros publicados en 2019 muestran que Clinton realizó más de 20 vuelos en seis viajes en el avión de Epstein: un vuelo de febrero de 2002 de Miami a Nueva York; un viaje de ida y vuelta de marzo de 2002 de Nueva York a Londres; un viaje de cinco tramos por Asia en mayo de 2002; un viaje de dos tramos de Marruecos a Portugal y de ahí a Nueva York en julio de 2002; un viaje de varios tramos en septiembre de 2002 de Nueva York a varias ciudades de África, París y luego Londres; y un viaje de varios tramos en noviembre de 2003 por Europa y China.
Hay dos personas que afirman que Clinton sí visitó la isla. Una de las víctimas de Epstein, Virginia Giuffre, declaró a un periodista en 2011 que recordaba haber visto a Clinton en la isla, en una cena después de que dejara el cargo. Doug Band, antiguo ayudante de Clinton, también dijo en un artículo de 2020 que el expresidente visitó la isla en 2003. Pero en ese artículo y en una declaración de 2019, un portavoz de Clinton negó que la hubiera visitado nunca.
Los mismos registros de vuelo muestran que Trump realizó al menos ocho vuelos en el avión: un viaje de ida y vuelta de Nueva Jersey a Florida en abril de 1993; dos vuelos distintos de Florida a Nueva Jersey en octubre de 1993; un viaje de dos tramos de Florida a Washington y a Nueva Jersey en mayo de 1994; un vuelo de Florida a Nueva Jersey en agosto de 1995; y otro vuelo de Florida a Nueva Jersey en enero de 1997.
Desviar la atención, o restar importancia
“No entiendo cuál es el interés o la fascinación. De verdad que no. Y la información creíble ya se ha dado. No olviden que pasamos por años de la cacería de brujas de Mueller y todas las diferentes cosas, el dossier Steele, que era todo falso, toda esa información era falsa. Pero no entiendo por qué el caso de Jeffrey Epstein le interesaría a alguien. Es un asunto bastante aburrido. Es sórdido, pero es aburrido. Y no entiendo por qué no para. Creo que, bueno, en realidad, solo gente muy mala, incluyendo a las noticias falsas, quiere que algo así no pare”.
— En declaraciones del 15 de julio
Esto contradice declaraciones anteriores. Durante su primer mandato y la campaña de 2024, Trump expresó un mayor interés por los archivos, cuestionó las circunstancias de la muerte de Epstein y prometió —aunque con cierta cautela— divulgar más información si resultaba electo.
En una aparición en Fox News en junio de 2024, cuando le preguntaron si “desclasificaría los archivos Epstein”, Trump respondió: “Sí, lo haría. Supongo que lo haría. Creo que no tanto porque no quieres afectar a la vida de la gente si hay cosas falsas ahí, porque hay muchas cosas falsas en todo ese mundo. Pero creo que lo haría”.
Y añadió: “Sin duda, sobre la forma en que murió, sería interesante averiguar qué pasó allí, porque fue una situación extraña, y dio la casualidad de que las cámaras no funcionaban, etcétera, etcétera”.
Trump también habló de Epstein en una entrevista de septiembre de 2024 con Lex Fridman, investigador y presentador.
“Es muy extraño para mucha gente que no se haya hecho pública la lista de clientes que fueron a la isla”, dijo Fridman.
“Es muy interesante, ¿no? Probablemente se hará, por cierto, probablemente”, respondió Trump, añadiendo: “Me inclinaría por lo de Epstein. No tendría ningún problema”.
“Dicen que es un buen tema para Trump. ¿Sabes que mis números en las encuestas han subido cuatro puntos y medio desde este ridículo asunto de Epstein? Mis números en las encuestas han subido cuatro puntos y medio porque la gente no se lo cree, ¿de acuerdo?”.
— En declaraciones del 28 de julio
Esto es exagerado. Lo más probable es que Trump se refiriera a encuestas recientes que muestran un ligero aumento del apoyo entre los republicanos, pero los sondeos muestran que su aprobación general ha disminuido ligeramente.
Por ejemplo, el 90 por ciento de los republicanos aprobaron a Trump en una encuesta de la Universidad Quinnipiac de mediados de julio, frente al 87 por ciento de finales de junio. Y el 88 por ciento de los republicanos dijeron que aprobaban a Trump en una encuesta de la CNN de mediados de julio, también un aumento respecto al 86 por ciento de abril.
Sin embargo, en semanas recientes el índice de aprobación de Trump ha descendido en varias encuestas. Un promedio de encuestas recopilado por Real Clear Politics mostró que su índice de aprobación neto había caído a un 7,1 por ciento negativo el 23 de julio, con un 52,7 por ciento de desaprobación de su actuación como presidente y un 45,6 por ciento de aprobación. Su aprobación neta había oscilado entre el 3 y el 5 por ciento negativo un mes antes.
Un promedio recopilado por The New York Times también muestra una trayectoria similar: la aprobación neta cayó a un 10 por ciento negativo a mediados de julio, frente a entre un 7 y un 9 por ciento negativo un mes antes.
Cuando se le preguntó a qué encuesta se refería Trump, el funcionario de la Casa Blanca se limitó a afirmar que “su nivel de aprobación está en el punto más alto de la historia”.
Negaciones rotundas
Periodista: “Concretamente, ¿le dijo ella en algún momento que su nombre aparecía en ese expediente?Trump: “No, no. Solo nos ha dado un informe muy rápido, y en términos de la credibilidad de las distintas cosas que han visto”.
— En declaraciones del 15 de julio
Esto contradice los informes. El Wall Street Journal informó a finales de julio que, de hecho, Pam Bondi, la fiscala general, informó a Trump en mayo de que su nombre aparecía en los archivos Epstein. The New York Times y otros medios de comunicación confirmaron esa información. El Times informó que Bondi y Todd Blanche, fiscal general adjunto, le informaron a Trump que su nombre, junto con el de otras personalidades de alto perfil, aparecía en documentos que no se habían hecho públicos.
“The Wall Street Journal publicó una carta FALSA, supuestamente dirigida a Epstein. Estas no son mis palabras, ni mi forma de hablar. Además, yo no hago dibujos”.
— En una publicación de redes sociales el 18 de julio
Esto fue falso. Cuando se le preguntó sobre un artículo reciente de The Wall Street Journal en el que se informaba que Trump había dibujado a una mujer desnuda como parte de una nota de cumpleaños obscena dirigida a Epstein en 2003, el presidente negó haberlo hecho y que siquiera hiciera dibujos en absoluto. Pero, como ya había documentado The New York Times, a principios de la década de 2000 Trump donaba regularmente dibujos a organizaciones benéficas.
Posteriormente, Trump reconoció que en realidad a veces sí dibujaba. Pero siguió cuestionando el tema de sus garabatos.
“A veces la gente me decía: ‘¿Dibujarías un edificio? Y yo dibujaba cuatro líneas y un tejadito, ya sabes, para una cosa benéfica. Pero no soy una persona que dibuje”, dijo más de una semana después. “No hago dibujos de mujeres, eso te lo puedo decir. Dicen que hay un dibujo de una mujer, y yo no hago dibujos de mujeres”.
c. 2025 The New York Times Company