México-EU, una relación entre la simulación y el descontento; revela Roberto Rock episodio de tensión entre diplomáticos
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El periodista asegura que el embajador de Estados Unidos Ken Salazar, así como la canciller Alicia Bárcena y el jefe de Unidad para América del Norte, Roberto Velasco fingen llevar una buena relación, cuando en realidad es complicada
CDMX.- Las tensiones y simulaciones entre los gobiernos de México y Estados Unidos quedaron evidenciadas en un reciente episodio entre diplomáticos mexicanos y el embajador de Estados Unidos Ken Salazar, asegura el periodista Roberto Rock.
De acuerdo con el periodista, el suceso ocurrió la mañana del miércoles pasado en el vuelo a Washington donde viajaban la canciller Alicia Bárcena, el jefe de Unidad para América del Norte, Roberto Velasco, y Salazar.
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En su columna semanal, Retrato Hereje, Rock asegura que Ken Salazar mantuvo discretas conversaciones, por separado, con Bárcena y Velasco, y que incluso el diplomático texano les susurró al oído.
“Ken Salazar, amigo personal del presidente norteamericano Joe Biden y su representante ante el Gobierno mexicano, acercó su rostro al oído de la canciller Alicia Bárcena para hablarle con susurros; incluso, se arrodilló en el piso del avión en el que ambos viajaron hacia Washington”, narra el editorialista hoy.
Bárcena y Velasco viajaron a Washington para participar en representación del presidente Andrés Manuel López Obrador en la cumbre de la Alianza para la Prosperidad Económica de las Américas (APEP, por sus siglas en inglés), propuesta por el estadounidense Joe Biden, cuya invitación el mandatario mexicano rechazó.
“La visita de Bárcena −la tercera durante su actual gestión− tuvo como misión central disimular el nuevo desdén del presidente López Obrador hacia el gobierno Biden”, refiere Rock.
FRICCIONES DENTRO DE LA CANCILLERÍA MEXICANA
Luego de hablar con Bárcena, añade el periodista en su artículo, el embajador de Estados Unidos en México se acercó a Velasco con quien sostuvo un diálogo aún más amplio con la misma discreción.
“Salazar usó un asiento desocupado a la derecha del asignado a Velasco Álvarez −el 21 D− y le hizo amplios comentarios de la misma manera: a escasos centímetros de su oído, mientras observaba documentos que le mostraba su interlocutor”, relata.
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Velasco, añade el editorialista, es una persona cercana al excanciller Marcelo Ebrard, quien lo “lo impulsó desde discretas posiciones −en concordancia con su nula experiencia diplomática− hasta el manejo de la agenda con la Unión Americana, la más compleja que tenga México en el mundo”.
De acuerdo con Rock, desde su llegada a la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), ha limpiado la cancillería de la influencia de Ebrard, “con excepción del área que conduce Velasco Álvarez con amplia autonomía, al grado de ignorar en ocasiones a la canciller y, con frecuencia, al embajador Moctezuma”.
¿CUÁLES SON LAS CAUSAS DE LA TENSIÓN MÉXICO-ESTADOS UNIDOS?
El periodista refiere que, de acuerdo con expertos consultados, los factores de la simulación entre los diplomáticos mexicanos y Salazar se debe principalmente “por la apatía de Palacio Nacional y la creciente insatisfacción de la Casa Blanca”.
En ese contexto, el editorialista refiere que la escena protagonizada por los tres funcionarios en el vuelo a Washington es reflejo de la relación EU-México.
“Cualquier pasajero que haya visto la escena debió reflexionar sobre cómo se tejen las relaciones entre Palacio Nacional y la Casa Blanca”, indica en su artículo.
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Rock, quien afirma tener imágenes e información sobre lo ocurrido en ese vuelo, cuenta que al final de éste, los diplomáticos mexicanos no cruzaron palabra.
“Fue ostensible la frialdad entre la canciller Bárcena y Velasco, quienes no cruzaron palabra. Salazar adelantó sus pasos y al entrar a la terminal aérea se topó con el embajador mexicano ante la Casa Blanca, Esteban Moctezuma. ‘Hi, pal (hola, amigo)’, dijo; se estrecharon brevemente la mano y el estadounidense caminó hasta el área de taxis de plataforma digital, donde abordó un vehículo”, detalla sobre el episodio.