Fiscalía de Michoacán contradice a García Harfuch; sí hubo detenidos tras narcobloqueos y estarían ligados al CJNG

Los recientes hechos violentos ocurridos en Michoacán, Guanajuato y Jalisco dejaron a la opinión pública con más preguntas que respuestas. Durante la conferencia matutina del 24 de abril, la presidenta Claudia Sheinbaum minimizó el conflicto, asegurando que “no hubo detenciones y solo fue un enfrentamiento entre grupos criminales”.

Poco después, el secretario de Seguridad, Omar García Harfuch, reforzó esa postura y negó que los bloqueos y la quema de vehículos estuvieran relacionados con la captura de un líder criminal. No obstante, esta narrativa fue desmentida por la Fiscalía General del Estado de Michoacán, que a través de un comunicado oficial confirmó la detención de dos personas presuntamente involucradas en los disturbios.

DETENCIONES CONFIRMADAS EN ZONAS AFECTADAS POR BLOQUEOS

De acuerdo con el comunicado, las detenciones fueron resultado de labores de inteligencia y operativos conjuntos entre fuerzas federales y estatales. La primera aprehensión ocurrió en la Autopista de Occidente, a la altura del municipio de Álvaro Obregón. El sujeto, identificado como Ignacio “N”, se encontraba en posesión de un vehículo con alteraciones en sus medios de identificación y portaba un equipo de comunicación, además de documentos presuntamente falsificados.

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La segunda detención tuvo lugar cerca de un camión torton incendiado en la misma autopista. En este punto, los agentes detuvieron a Aristeo “N”, quien filmaba la escena con un celular desde una motocicleta. Durante su interrogatorio, el detenido admitió colaborar con una célula criminal, y se presume que pertenece al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).

En el área se hallaron también casquillos percutidos y un galón de gasolina, lo que refuerza las sospechas de su participación directa en los actos vandálicos.

¿UNA RESPUESTA DEL CJNG A LA DETENCIÓN DE UN LÍDER?

Aunque no ha sido confirmado oficialmente, fuentes extraoficiales apuntan a que los bloqueos, incendios y ataques en los tres estados podrían haber sido una reacción del CJNG tras la supuesta captura de un líder de alto nivel dentro de su estructura. Esta persona sería allegada a Nemesio Oseguera Cervantes, alias “El Mencho”, líder del cártel.

La falta de información clara por parte de las autoridades federales contrasta con las versiones estatales y ha generado confusión y preocupación entre los ciudadanos, especialmente en las zonas afectadas, donde la presencia de grupos armados ha generado un clima de tensión constante.

BALANCE DE VÍCTIMAS Y OPERATIVOS EN CURSO

El secretario García Harfuch también confirmó que durante los disturbios murieron dos policías, aunque no se han dado detalles específicos sobre las circunstancias.

Por su parte, la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), la Guardia Nacional y la Guardia Civil de Michoacán anunciaron que continuarán los operativos de vigilancia en al menos 26 municipios para restaurar el orden y evitar nuevas escaladas de violencia.

DATOS CURIOSOS Y RELEVANTES

La contradicción entre la Fiscalía de Michoacán y autoridades federales ocurre en un momento crucial para la estrategia de seguridad del país.

El detenido Aristeo “N” confesó su relación con una célula criminal mientras filmaba los disturbios con un celular, lo que apunta a un posible intento de difundir terror o propaganda.

Los narcobloqueos, típicamente utilizados como distracción o presión por grupos criminales, se extendieron por tres estados simultáneamente, una muestra clara del nivel de coordinación que manejan.

La posesión de vehículos modificados y radios de comunicación por parte de los detenidos sugiere una operación previamente planeada.

CONCLUSIÓN: UNA VERDAD A MEDIAS EN LA NARRATIVA OFICIAL

El caso de los narcobloqueos en Michoacán, Jalisco y Guanajuato ha dejado al descubierto una grieta entre las declaraciones de autoridades federales y estatales. Mientras la presidencia y la Secretaría de Seguridad niegan detenciones y minimizan los hechos como un choque entre bandas rivales, la Fiscalía de Michoacán presenta pruebas documentadas de arrestos y posibles vínculos con el CJNG.

Este contraste pone en tela de juicio la transparencia del gobierno federal en temas de seguridad pública y plantea una pregunta clave: ¿se está ocultando información para evitar el reconocimiento de la fuerza operativa de los cárteles?

En un escenario donde los grupos criminales siguen mostrando poder de fuego y capacidad de movilización, la sociedad exige verdades completas, acciones contundentes y coordinación real entre niveles de gobierno. Mientras tanto, los ciudadanos permanecen en medio de versiones encontradas y un clima de incertidumbre.