Mujeres en Nuevo León ya podrán solicitar dos días de licencia menstrual

Las mujeres y personas menstruantes con diagnósticos médicos de dismenorrea o endometriosis en Nuevo León podrán solicitar en sus centros laborales hasta dos días de incapacidad durante los días de periodo menstrual.

Desde el pasado 5 de enero, en el Periódico Oficial del Estado se publicó el decreto emitido por el Congreso Local de Nuevo León para reformar la Ley de Servicio Civil, así como otorgar a quien le sea diagnosticado con endometriosis severa o dismenorrea primaria en grado incapacitante, el máximo de dos días al mes para trabajar desde casa.

Sin embargo, para hacer valer la ausencia es necesario presentar un certificado de salud emitido por alguna institución de seguridad social, federal, estatal o municipal. Además, dichos certificados serán válidos si son expedidos por médicos particulares, el cual deberá incluir cédula profesional del médico, fecha de emisión, Estado y nombre de la paciente.

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La reforma de licencia menstrual fueron aprobadas por el Pleno del Congreso del Estado el pasado 23 de octubre, aunque el dictamen inicial proponía tres días de ausencia, el Periódico Oficial resolvió dos días. Así como que fue valorada en diversos Estados de la República desde febrero del año pasado; pero fue hasta inicios de 2024 cuando entró en vigor.

¿QUÉ ES LA ENDOMETRIOSIS Y DISMENORREA?

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la endometriosis es una enfermedad en la que al exterior del útero crece un tejido “similar a la mucosa interior del útero que puede causar un dolor intenso en la pelvis”. Sin embargo, hasta el momento se desconoce la causa, su prevención y un tratamiento para curarla, aunque existen medicamentos para los síntomas, pero en ocasiones es necesario realizar una operación quirúrgica.

También provoca una reacción inflamatoria crónica que da lugar a la formación del tejido cicatricial dentro de la pelvis, lo que también provoca dolor en la parte inferior del vientre durante la menstruación, durante y después de relaciones sexuales, así como al orinar y defecar.

Además de dolor pélvico crónico, hemorragia intensa durante la menstruación o entre menstruaciones, dificultad para quedar embarazada, gases, náuseas, cansancio, depresión y ansiedad.

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Mientras que la dismenorrea es un dolor uterino al momento de la menstruación, sobre todo en las primeras 24 horas y llegar hasta los 2 o 3 días; se trata de un dolor cólico o sordo constante, pero puede ser agudo o pulsátil, llegando a irradiarse a espalda y piernas.

Aunado a las cefaleas, las náuseas, el estreñimiento o la diarrea, el dolor de espalda y la polaquiuria son comunes; los vómitos son ocasionales.

Existen dos tipos de dismenorrea: la primaria, se refiere al dolor menstrual que ocurre cuando comienza el periodo menstrual y no está relacionado con algún problema específico; y secundaria, el cual es el dolor menstrual que se desarrolla en mujeres que con anterioridad habían presentado ciclos normales y está relacionada con padecimientos como endometriosis, miomas, enfermedad inflamatoria pélvica.

De acuerdo con la Subsecretaría de Prevención y Promoción de la Salud de la Secretaría de Salud, la dismenorrea “provoca dificultad en el desempeño de las actividades diarias normales. Se estima que el 50% de las mujeres han presentado dismenorrea en algún momento de sus vidas”.