Tras el fiasco del caso Paulette, Bazbaz regresa 'a lo grande'
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El defenestrado ex procurador del Edomex en el gobierno de Peña Nieto, y cuyo nombramiento federal fue duramente cuestionado, vuelve a los reflectores con el caso Gordillo
El titular de Inteligencia Financiera de la PGR, Alberto Bazbaz Sacal, pasó del mayor ridículo en los últimos años en el ámbito policiaco mexicano, a casi el heroísmo, pues en tan sólo un mes logró lo que en los últimos tres sexenios no pudieron: armar un caso para poner a Elba Esther Gordillo tras las rejas.
Cabe recordar...
La mañana del lunes 22 de marzo, la asistente doméstica de la familia Gebara Farah, comunicó a los señores Lizette y Mauricio que su hija menor Paulette no se encontraba en la recámara, donde el domingo por la noche se había recostado.
Nueve días después, 31 de marzo, la búsqueda concluyó cuando un agente judicial de la Procuraduría mexiquense encontró abajo de las cobijas y colchón de la cama el cuerpo sin vida de la menor.
Cuando apareció el cuerpo, la Procuraduría que encabezaba Bazbaz sumaba a la investigación por desaparición, la sospecha de homicidio. Los papás y las niñeras de Paulette estaban arraigados debido a las contradicciones en que habían caído.
Durante el arraigo de los padres de Paulette, el entonces procurador Bazbaz solicitó apoyo de diversos especialistas y fue cuando Sandra Yadeum, doctora en Psiquiatría Legal por la Universidad Complutense de Madrid, aseguró que Lizette Farah tiene una personalidad sorprendente.
Vino entonces el hallazgo del cuerpo de la menor en la cama donde había sido dejada la noche de su desaparición. Con ello se puso en duda la investigación de la Procuraduría mexiquense, y más al presentar las conclusiones del caso en las que se determinó que la pequeña siempre estuvo en su cama y no pudo ser encontrada por los peritos que encabezaron la búsqueda.
Semanas después Bazbaz reconoció que en la investigación del caso Paulette habían existido errores.
A partir del lunes 22 de marzo, en la cama y habitación donde "desapareció" la menor y posteriormente se le encontró muerta, durmieron familiares y amigos que apoyaban la búsqueda de Paulette y también habrían estado más de 80 personas, entre representantes de medios de comunicación, policías e incluso el propio Bazbaz.
"El cuerpo de la menor no fue manipulado después de su muerte, es decir, que la menor permaneció en el lugar donde fue encontrada desde que murió. Que el tiempo preciso de la muerte fue 9 días previos a la fecha y hora de la necropsia, lo que demuestra que la menor murió la noche en que llegó de Valle de Bravo o a más tardar en las primeras horas de la madrugada del 22 de marzo", estableció al dictamen que también selló la suerte de Bazbaz.
El peritaje final sostuvo que hubo un desplazamiento de dirección de cabeza a pies, y desencadenó un accidente que le provocó "asfixia mecánica por sofocación en su modalidad de obstrucción de orificios de la respiración", es decir un accidente mortal casero... ni homicidio ni secuestro.
El 28 de mayo, Bazbaz renunció a la Procuraduría mexiquense y su sustituto fue Alberto Castillo Cervantes, el fiscal que encabezó las investigaciones del caso.
Lizette Farah, madre de la pequeña Paulette demandó luego a Enrique Peña Nieto, entonces gobernador del Estado de México y virtual candidato del PRI a la Presidencia.
Dicha demanda también fue contra la Procuraduría General de Justicia del Estado de México, el exprocurador Alberto Bazbaz, el siguiente procurador Alfredo Castillo y la psicóloga Sandra Yadeum Angulo. Todos la acusaron de la muerte de su hija sin pruebas.
Antes de la demanda por daño moral de la madre, se destapaba también que había más pruebas contra el padre, Mauricio Gebara, quien tenía buenas relaciones empresariales y políticas con el entonces gobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto, por lo que logró que, desde el más alto nivel, se tomara el control de la investigación. El procurador del Estado de México, Alberto Bazbaz, y el subprocurador Alfredo Castillo, fueron enviados por Peña Nieto para asumir el mando de las pesquisas.
A los pocos días, Bazbaz y Castillo tenían una única sospechosa: Lizette Farah, la mamá de Paulette, a quien acusaron de haberla desaparecido. Aun sin concluir la indagatoria, revelaron datos de la investigación para dañar públicamente a la madre de Paulette.
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¿Se reivindica con Gordillo?
Según la información oficial, la investigación a Elba Esther Gordillo empezó en diciembre pasado cuando la Unidad de Inteligencia Financiera, que encabeza el ex procurador del estado de México, Alberto Bazbaz, detectó una transacción bancaria irregular.
Cabe señalar también que el juez Caballero Vértiz multó a Bazbaz, así como a otros funcionarios de la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), por incumplir dos veces con un ordenamiento del mismo juzgador para que acudieran al juzgado en el Reclusorio Oriente, como parte de las pruebas de descargo que solicitó la lideresa magisterial.
Ni Bazbaz ni el director general de la UIF ni los representantes de dos empresas implicadas acudieron a ampliar su declaración, como les fue ordenado ya dos veces por el juez.
Y APROVECHANDO.
Mientras el escándalo Gordillo acapara los medios informativos, importantes decisiones se toman en otros ámbitos:
- PRI va por el IVA alimentos y bebidas.
- Diputados avalan eliminar el fuero constitucional.
- Los `gasolinazos' continúan.
- Se difunde públicamente la riqueza de otros líderes sindicales.