Regresan las misas en latín a México
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La misa tridentina constituye "el esplendor litúrgico del dogma católico" y fue reinstaurada por el papa Benedicto XVI para preservarla y acercar a grupos católicos que nunca dejaron de practicarla, como los lefebvristas.
México, D.F..- Un sacerdote católico habla en latín de frente a la figura de Cristo en el altar y da la espalda durante la misa a la feligresía, en una antigua capilla del centro de la Ciudad de México. Se escuchan cantos gregorianos y las mujeres se cubren la cabeza con velo. No es una imagen del México de hace medio siglo, sino de este 2010.
Con la anuencia del arzobispo primado de México, Norberto Rivera Carrera, la misa tridentina (así llamada por el Concilio de Trento de 1570), que cayó en desuso a finales de los años 60 del siglo pasado, se vuelve a practicar de forma periódica en el Distrito Federal.
Lo anterior, luego de que el 7 de junio de 2007 el papa Benedicto XVI emitiera un decreto para reinstaurar esta misa tradicional, en los lugares donde una comunidad lo demande, con objeto de preservar el antiguo rito, sustituido en 1965 por el Papa Pablo VI durante el Concilio Vaticano II.
En la antigua Capilla de las Animas, ubicada atrás de la Catedral Metropolitana, se ha restaurado el rito tridentino. La misa en latín se realiza desde este año al mediodía del primer domingo de cada mes y sus promotores están en busca de una iglesia donde dicha práctica quede fija.
La Fraternidad Sacerdotal de San Pedro (FSSP), Sociedad Clerical de Vida Apostólica de Derecho Pontificio, creada en 1988, promueve el regreso a la misa en latín en la ciudad, una vez de contar con la anuencia del Papa y del arzobispo de esta jurisdicción religiosa, el cardenal Rivera.
La misa celebrada el pasado domingo "de sexagésima", con una asistencia cercana a cien feligreses, correspondió a la preparación para el tiempo de Cuaresma; se usaron ornamentos morados y la celebración fue presidida por el padre Kenneth Fryar.
Cada mes, el sacerdote viajará desde Guadalajara para oficiar la misa en latín en la Ciudad de México, gracias a la formación de un comité para la promoción de dicho rito, que pide a los asistentes a la capilla "vestir tan decorosamente como sea posible y a las damas, usar velo".
Pero no sólo eso, como el proyecto para la reinstauración del acto litúrgico tradicional es a largo plazo, la FSSP continúa en la búsqueda de una iglesia del centro histórico que pueda albergar a más feligreses, y pretende formar un coro que cante en latín.
"Otras formas de cooperar en este proyecto son el entrenamiento de acólitos y de un coro de canto gregoriano. Ambos son indispensables para poder celebrar misa cantada", se explica en un escrito distribuido a los asistentes el pasado domingo.
La celebración en latín, que fue de práctica común durante cuatro siglos, se realiza de acuerdo al Misal Romano de 1570 del papa Pío V, quien decretó que fuese unificado el rito de la Iglesia católica universal.
La misa tridentina constituye "el esplendor litúrgico del dogma católico" y fue reinstaurada por el papa Benedicto XVI para preservarla y acercar a grupos católicos que nunca dejaron de practicarla, como los lefebvristas.
Hace un año, el 24 de enero de 2009, el sumo pontífice levantó la excomunión a los cuatro obispos ordenados por Marcel Lefebvre, quienes habían rechazado el Concilio Vaticano II. El pontífice abrió la posibilidad del reencuentro al aceptar la práctica ordinaria de las misas en latín.