Caso de Pedro Salmerón patenta el machismo en México, dice líder feminista de Panamá

El nombramiento de Salmerón como embajador, que aún debe cumplir una serie de trámites en México, provocó protestas de exalumnas y supuestas víctimas de acoso sexual del historiador, que en 2019 renunció al Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México (Inehrm).

Por su parte, la Cancillería de Panamá ya dio a conocer su posición a su contraparte en México, informó esta semana la ministra panameña de Relaciones Exteriores, Erika Mouynes.

Mientras que Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, insiste en que no reconsiderará la designación de Salmerón y lo defiende afirmando que “es uno de los mejores historiadores” de México, además de no existen denuncias formales en su contra ante los organismos competentes ni ha sido condenado judicialmente por caso alguno de acoso sexual.

En opinión de Gilma de León, abogada y presidenta de la Fundación para la Equidad de Género (Fundagénero), con esa posición, por parte de AMLO “lo que está manifestando es la falta de credibilidad en los señalamientos reiterados que han hecho estas mujeres y que han sido debidamente documentados” en @MeTooITAM y @MeTooAcadémicosMx.

Se ha denunciado “la misma conducta” por parte de Salmerón, “de forma reiterada, en distintos momento y en perjuicio de diferentes mujeres”, aseguró de León, quien a su vez, censuró la “indiferencia” de López Obrador al zanjar el asunto “sencillamente argumentando si hay o no hay una denuncia judicial, o si ha sido condenado o no”, añade. Esta postura “tiene que ver con la visión que se tiene en México del respeto a la dignidad de la mujer y cómo se banalizan y se minimizan o se invisibilizan estos temas en perjuicio de los derechos humanos de las mujeres”. explica. “México, y es un hecho cierto, es un país que destaca por sus posturas machistas, patriarcales”, declaró la feminista panameña, por lo que se podría pensar que las presuntas víctimas de Salmerón “no se han atrevido o el status quo no les ha permitido tener acceso a los tribunales para presentar las denuncias que, en este momento, quedan en nivel de señalamientos”. concluye.

Tanto la presidenta de Fundagénero y otras 10 organizaciones feministas esperan que el Gobierno de Panamá no conceda su beneplácito a Salmerón si el nombramiento llega a oficializarse ante la Cancillería panameña. “Esperamos que se siente un precedente y que la dignidad de las mujeres mexicanas sea respetada. El rechazo a la designación (de Salmerón) representaría una gestión valiente, digna de nuestro país”, expresa de León.

En una carta de Fundagénero que le fue entregada a la Cancillería de Panamá, las once organizaciones feministas de este país precisan “que no se puede considerar a personajes como Salmerón como embajador y al mismo tiempo expresar que somos un Estado que favorece la equidad de género”.

A su vez, puntualizan que según la normativa vigente en Panamá “y en cumplimiento del principio de convencionalidad por los Convenios de respaldo a los Derechos Humanos de los que Panamá es suscriptor, no debemos aceptar nombramientos inconvenientes, como pretende el Estado Mexicano”.

Con información de la Agencia EFE.