Con Peña Nieto, ingreso de los más pobres aumentó 10 pesos en 4 años; el de los ricos, 100
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La organización civil Oxfam presentó un decálogo de iniciativas para reducir la brecha de desigualdad en México, donde las 10 personas más ricas tienen la misma riqueza que el 50 % más pobre
Por Manu Ureste (@ManuVPC) para Animal Político
En los primeros cuatro años del sexenio de Enrique Peña Nieto, de 2012 a 2016, el ingreso promedio de los ciudadanos más pobres aumentó 10 pesos al día, mientras que el de los más ricos subió nueve veces más: 100 pesos.
Así lo documenta la organización civil Oxfam México en su informe ‘México Justo’, en el que se expone que la brecha de desigualdad en el país continúa abriéndose, a pesar de las políticas y los programas sociales implementados por el Gobierno federal para abatir la pobreza.
De acuerdo con el estudio, en los primeros cuatro años de Peña Nieto el ingreso promedio de la población más pobre subió un 15.2 %, y el de la más rica lo hizo un 5.92 %.
En términos relativos estas cifras suponen que la desigualdad en el país se redujo. Sin embargo, el informe puntualiza que la brecha entre lo que ganan pobres y ricos es tan grande, que el aumento del 15.2 % para los más pobres significa ingresar tan solo 10 pesos diarios extra, mientras que para los más ricos el aumento del 5.92 % equivale recibir 100 pesos extra.
Con esos 10 pesos, lo más pobres solo podrán comprar, por ejemplo, dos boletos de metro más al día, o medio kilo de tortillas más. En cambio, con 100 pesos, los más ricos podrán comprar dos boletos más para ir al cine, un café frapuccino, o una comida corrida extra diaria.
O en otras palabras: para los más pobres, el aumento en sus ingresos no les alcanza para satisfacer necesidades básicas de alimentación. En cambio, los más ricos pueden gastar más en esparcimiento y en comprar bienes sobrevalorados. Por eso, subrayó en entrevista Diego Vázquez, gerente de investigación de Oxfam y uno de los autores del informe, aunque en términos porcentuales los pobres aumentaron más sus ingresos que los ricos entre 2012 y 2016, la brecha de desigualdad en la práctica continúa siendo muy grande.
Las cifras a nivel macro también corroboran esa brecha. Por ejemplo, México está dentro del 25 % de los países con mayores niveles de desigualdad en el mundo, según datos del Banco Mundial. Mientras que en 2017, tan solo el 1 % de los mexicanos más ricos concentró el 28 % de la riqueza de todo el país.
“La brecha entre ricos y pobres son tan marcadas, que en México vive el hombre más rico de América Latina junto con más de 50 millones de personas pobres”, apunta el informe.
Y otro dato: según las últimas cifras del ranking de Forbes, la riqueza de los mexicanos más ricos en 2017 fue de 116 mil millones de dólares. Esto supone que las 10 personas mexicanas más ricas tienen la misma riqueza que el 50 % más pobre de México.
Decálogo contra la desigualdad
Ante este contexto, Oxfam presentó un decálogo de iniciativas para reducir la brecha de desigualdad.
En primer lugar, se plantea crear “mecanismos innovadores” desde la sociedad civil para la exigencia de transparencia y rendición de cuentas. Uno de esos mecanismos sería la creación de una “auditoría ciudadana” que vigile la correcta aplicación de los recursos públicos.
“Como ciudadanos debemos empezar a ejercer el derecho a preguntar a nuestras autoridades qué está pasando con nuestro dinero, cómo se va a ejercer y cuáles son los resultados”, recalcó Ricardo Fuentes, director de ejecutivo Oxfam México.
“Y hay que abrir otro debate sobre cómo se van a recuperar todos los recursos desviados a través de la corrupción. Es decir, ¿qué es lo que pasa con todas esas fortunas que se llevaron?”, añadió Fuentes, quien ejemplificó que con los 35 mil millones de pesos desviados por el exgobernador Javier Duarte, según la acusación de la Procuraduría General de la República, serían suficientes para cubrir durante un año las necesidades básicas de todos los veracruzanos que viven en pobreza extrema.
Segunda propuesta: consolidar un sistema de seguridad social universal efectivo en México, “con servicios de salud y pensiones para todos y todas”.
Tercera, incrementar los recursos de las cinco entidades federativas más pobres de México para mejorar la infraestructura escolar, construir nuevos hospitales y aumentar las becas para estudiantes de bajos ingresos.
Cuarta, enfocar los recursos federales a incentivar la matriculación escolar en el nivel medio superior, “el cual cuenta con la mayor deserción entre estratos de bajos ingresos”.
Quinta, elevar el salario mínimo hasta la línea de bienestar, que es de 2 mil 959 pesos mensuales, “seguido de aumentos graduales de acuerdo a la inflación del país”.
Aplicar un impuesto a la herencia y diseñar una mejor recaudación del impuesto predial, son otras de las iniciativas que contempla el decálogo.
Para hacer llegar estas peticiones a los candidatos que en las próximas elecciones buscan un cargo público, los ciudadanos pueden firmar una petición en la página web de Oxfam México.