Hay más niños que adultos pobres en México: OCDE

Nacional
/ 17 octubre 2018

Necesario, estrategia nacional. Afecta carencia económica a 17% de la población general, pero a 20% de infantes

México se ubicó entre los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) en los que prevalece un rango alto de pobreza infantil. La proporción de menores que vive en esa condición es mayor que la registrada para el total de la población, reveló un reporte de ese organismo difundido ayer.

Alrededor de 20 por ciento de la población infantil, esto es, uno de cada cinco niños, pertenece en México a familias de bajos ingresos y a menudo enfrentan riesgos de pobreza mayores que los demás grupos poblacionales, de acuerdo con la OCDE.

En México, el total de la población en pobreza, incluyendo niños y adultos, es de 17 por ciento, de acuerdo con información de la organización multinacional.

Para identificar a niños que viven en pobreza económica, la OCDE utiliza el criterio de personas de cero a 17 años con ingresos equivalentes, después de impuestos y transferencias –como programas sociales–, a menos de 50 por ciento del ingreso nacional promedio.

El ingreso promedio en México, según los criterios de ese organismo, es de 15 mil 314 dólares al año, aunque con un nivel de inequidad en el que 20 por ciento de la población más beneficiada tiene un ingreso 14 veces superior al del 20 por ciento menos favorecido.

En el reporte Niños pobres en países ricos: por qué necesitamos medidas de política, el organismo mencionó que en los países donde la pobreza infantil se encuentra por arriba del promedio de la OCDE, los niños suelen estar más expuestos a la pobreza económica que el total de la población. '

En México, la tasa de pobreza económica entre los niños es 7 puntos porcentuales más que el promedio de la OCDE, de 13 por ciento.

En el reporte, la OCDE consideró necesario que a escala nacional se ponga en práctica una estrategia integral de combate a la pobreza infantil.

Las prestaciones familiares y de vivienda pueden sacar a las familias de la pobreza si su ingreso no está desde un inicio demasiado lejos de la línea de pobreza. Si bien esas ayudas también mejoran la calidad de vida de las familias con los ingresos más bajos, su nivel no es lo bastante elevado para sacarlas por completo de la pobreza y atender todas las necesidades de los niños, indica el reporte.

Añade que atender esas necesidades requiere una amplia gama de políticas para mejorar la calidad del entorno en que viven las familias pobres, bien sea en términos de vivienda o para asegurar que se cubran todas sus necesidades básicas en términos de nutrición, vestido o acceso a recursos para estudios y actividades recreativas.

COMENTARIOS

Selección de los editores