“La Mataviejitas” la mujer que asesinó a 17 ancianas y no se arrepiente de sus actos

Nacional
/ 15 octubre 2018

Asesinos seriales mexicanos. La mexicana Juana Barraza Samperio, de 60 años, era la “Dama del Silencio” cuando se dedicaba a la lucha libre. Fue detenida en 2006 y condenada por esa docena y media de crímenes, aunque se estima que pudieron ser unos 40

Cada enciclopedia de historias de asesinatos y asesinos tiene sus personajes. México tiene para unos cuantos tomos. Y, sin dudas, esta mujer completaría holgadamente uno de los capítulos. Se llama Juana Barraza Samperio, tiene 60 años, y su último apodo es "La Mataviejitas", aunque su pasado como luchadora libre (una atracción en tierras aztecas) la hizo conocer como "La Dama del Silencio".

Barraza cumple con el perfil de una asesina serial. "La Mataviejitas", en libertad, se dedicaba al comercio y a la lucha libre. Y cuando bajaba del ring se disfrazaba de asistente y elegía a sus víctimas, todas ancianas.

En algunos casos las golpeaba, en otros las apuñalaba y a veces las estrangulaba. El Gobierno mexicano pasó años buscándola hasta que dio con ella en 2006. El juez la sentenció por 17 asesinatos, pero se estima que sus víctimas pueden ser unas 40.

La mujer se ganaba la confianza de las abuelas que vivían solas. Los pocos testigos que la vieron luego de cometer algún crimen dijeron haberla visto siempre con atuendos color rojo. En varias de las casas de las víctimas se encontraron copias del cuadro "El niño del chaleco rojo", de Paul Cézanne. Por eso, las autoridades daban por sentado que buscaban a un hombre vestido de mujer.

Pero en enero de 2006, Barraza cometió un error. Apuñaló y estranguló a Ana María de los Reyes Alfaro, de unos 80 años. Pero en ese caso la víctima no estaba sola: tenía un inquilino. El hombre dio la voz de alarma y la policía la detuvo minutos después. "La Mataviejitas" era una mujer.

El día de su detención explicó por qué mataba ancianas con las que no tenía ninguna relación previa. "Yo odiaba a las señoras, porque mi mamá me maltrataba, me pegaba, siempre me maldecía y me regaló con un señor grande". La madre de Barraza era una mujer alcohólica que ofrecía a su hija a sus varias parejas a cambio de dinero.

Nunca mostró señal alguna de arrepentimiento por sus crímenes. Explicó que había elegido matarlas por "necesidad económica" y afirmó que no había cometido todos los asesinatos de los que se le acusaba, sino solo en el que había sido sorprendida en el acto.

La Mataviejitas es un ícono del mundillo criminal mexicano. Inspiró un programa de televisión y hasta varias canciones. "La Mataviejitas quiere echarse a tu abuelita / es una descarada, no la detiene nada / Luchadora profesional / La Dama del Silencio se hace llamar / Nadie sospecha, nadie imagina / Esta asesina puede ser una vecina", dice una composición de la artista Amandititita.

En 2014 declaró al periódico mexicano Excélsior que "duerme tranquila por las noches" y que "se sentía contenta con su vida". 

6 Datos sobre “La Mataviejitas” Checa estos seis datos para ponerte al día con la vida de esta terrorífica asesina serial que conmocionó a todas las abuelitas de la CDMX.

1. Una todóloga: daba cuidados de enfermería, llegó a dedicarse a la lucha libre con el seudónimo de la Dama del Silencio, incluso vendió palomitas afuera de la arena donde se presentó como luchadora.

2. “Yo odiaba a las señoras, porque mi mamá me maltrataba, me pegaba, siempre me maldecía y me regaló con un señor grande”, fue una de las razones que dio para cometer varios homicidios.

3. Su sentencia es la más larga que una mujer ha tenido en la historia criminal de nuestro país: En 2008, Juana Barraza fue condenada por el juez 67 de lo penal, a 759 años y 17 días de prisión en Santa Martha Acatitla.

4. Juana Barraza contrajo nupcias el 26 de junio de 2015, en prisión, con un reo de alta peligrosidad llamado Miguel Ángel. Fue una boda colectiva celebrada como parte de la campaña Lazos en Reclusión.

5. Barraza cayó en enero de 2006, cuando apuñaló y estranguló a Ana María de los Reyes Alfaro, de 80 años. La criminal no se dio cuenta de que la víctima tenía un inquilino, quien la denunció a la policía y fue detenida

6. En 2016, a un año de contraer matrimonio, dijo que “el amor se le acabó, que los hombres son muy desgraciados” por lo que exigió el divorcio. Su relación se basó en un intercambio de cartas y 40 minutos a solas con su pareja.

TEMAS

COMENTARIOS

Selección de los editores