Se pasaron de tueste Felipe Calderón y Humberto Moreira: periodista

Nacional
/ 28 marzo 2017

El cruce de acusaciones entre el expresidente y el exgobernador puede caer, más allá de la irresponsabilidad, en la ilegalidad

Más allá de las declaraciones folclóricas y el intercambio de acusaciones en el marco del proceso electoral en Coahuila, los dichos que Felipe Calderón y Humberto Moreira intercambiaron el domingo pasado en Saltillo podrían caer en la ilegalidad.
 
En su artículo “Calderón y Moreira se pasan de hocicones” que hoy aparece en la página electrónica de IMAGEN.MX, el periodista Juan Bustillos advierte que el 26 de marzo se cruzaron dos aseveraciones “que merecen, en uno de los casos, la atención del procurador general Raúl Cervantes y, por el otro, el de los historiadores, para decir lo menos”.
 
Bustillos admite que “es probable que Felipe Calderón y Humberto Moreira no sean más que un par de lenguas largas u, como dicen en El Grullo, hocicones”, pero sostiene que el episodio es más serio.
 
“No puede el expresidente de la República señalar a Moreira como relacionado con todo tipo de grupos criminales, en especial ‘Los Zetas’, sin que la PGR llame a ambos para determinar la existencia de delitos”, escribió.
 
“Pero tampoco”, añadió, “puede el exgobernador de Coahuila y expresidente del PRI afirmar que, mediante componendas políticas, Calderón robó la Presidencia a Andrés Manuel López Obrador en el 2006 sin comparecer, al menos, ante la prensa a ofrecer algo más que su desgastada palabra”.
 
Juan Bustillos recuerda que este par de personajes “la llevan mal de siempre (…) Pero ahora sí ambos se pasaron de tueste”.
 

El analista destaca que Moreira dio a López Obrador oportunidad de presumir que cuenta con un testigo de “calidad”, poseedor de pruebas de que fue defraudado por la “mafia en el poder” en el 2006.
 
“Es un asunto grave porque significaría, de ser cierto lo que dice Moreira, que durante seis años fuimos gobernados por un Presidente espurio, tema que, en todo caso, es de constitucionalistas e historiadores; quizás de penalistas”.
 
Ante ello, es importante que Humberto Moreira tenga presente que él gobernó Coahuila cuando se cometió el presunto fraude contra López Obrador, y si lo supo entonces debió denunciarlo. ¿Por qué guardar el secreto hasta hoy?
 
Es el caso de Calderón: Si como Presidente tuvo pruebas de la supuesta vinculación de Moreira con “Los Zetas” ¿por qué no actuó en su contra en ese momento?, se plantea en IMAGEN.MX.
 
“Las implicaciones de ambas aseveraciones son tan graves que quizás lo mejor sea dejarlas en simples hociconadas irresponsables”.

 

COMENTARIOS

Selección de los editores