Ratas, cucarachas, moscas y chinches: ola de calor desata peligrosas plagas urbanas... ¿Qué enfermedades transmiten?

Con la llegada de las altas temperaturas, se ha observado un aumento en la presencia de plagas como moscas, mosquitos, cucarachas, roedores y avispas. Estos insectos y animales, además de resultar molestos, representan un riesgo para la salud debido a su capacidad de transmitir bacterias y microorganismos.

El incremento de calor causado por el cambio climático ha brindado condiciones propicias para que organismos como ratas, mosquitos y arácnidos se adapten y se reproduzcan más rápidamente, convirtiéndose en plagas que pueden causar problemas para la salud humana.

TE PUEDE INTERESAR: ¿Cuándo inicia la temporada de arañas en México?... cómo saber cuáles son peligrosas y qué hacer si las vemos en casa

Las altas temperaturas promueven la reproducción y aceleran el ciclo reproductivo de los insectos, lo que lleva a un aumento en la puesta de huevos y en su madurez. Estos organismos, como chinches o ácaros, no solo constituyen plagas, sino que también albergan microorganismos en su estructura.

Los cambios climáticos favorecen el desplazamiento de las plagas, lo que a su vez conlleva la aparición de nuevas enfermedades en áreas donde antes no eran comunes. Un ejemplo de ello son los mosquitos que transmiten enfermedades como el dengue, zika, chikungunya y fiebre amarilla, como el Aedes aegypti y el Aedes albopictus.

Además, el entorno urbano, caracterizado por la falta de higiene, contribuye a la proliferación de esta fauna perjudicial, como ratas y cucarachas, las cuales pueden transmitir diversas enfermedades a los seres humanos.

Pero... ¿Qué enfermedades transmiten las plagas?

Ratas

Las ratas son portadoras de diversas enfermedades y pueden transmitirlas a los seres humanos a través de diferentes mecanismos, como la mordedura de la rata, el contacto con sus heces, la inhalación de partículas contaminadas o la exposición a pulgas y garrapatas que infestan a estos roedores. Algunas de las enfermedades transmitidas por las ratas incluyen:

Leptospirosis: Es una enfermedad bacteriana causada por la bacteria Leptospira, que se encuentra en la orina de las ratas. Se transmite al entrar en contacto con agua, suelo o alimentos contaminados con la orina de ratas infectadas. Puede provocar fiebre, dolores musculares, ictericia, insuficiencia renal y, en casos graves, puede ser mortal.

Salmonelosis: Las ratas pueden portar la bacteria Salmonella en su tracto digestivo y eliminarla a través de sus heces. La transmisión ocurre al consumir alimentos o agua contaminados con estas heces. La salmonelosis causa síntomas gastrointestinales como fiebre, diarrea, vómitos y dolor abdominal.

Hantavirus: El hantavirus es un virus transmitido principalmente por las heces, la orina y la saliva de los roedores, incluidas las ratas. La infección en humanos puede ocurrir al inhalar partículas de polvo contaminado con excrementos de ratas infectadas. Los síntomas pueden variar desde fiebre, dolores musculares y dificultad respiratoria hasta casos más graves de síndrome pulmonar por hantavirus, que puede ser mortal.

Peste bubónica: Aunque actualmente es rara, las ratas pueden ser portadoras de la bacteria Yersinia pestis, que causa la peste bubónica. Esta enfermedad se transmite a través de las pulgas que infestan a las ratas y luego pican a los seres humanos. La peste bubónica puede causar fiebre alta, inflamación de los ganglios linfáticos, escalofríos y, en casos graves, insuficiencia orgánica.

Cucarachas

Las cucarachas son conocidas como portadoras de diferentes enfermedades y pueden transmitirlas a los seres humanos de varias formas, principalmente a través del contacto directo con ellas, el consumo de alimentos contaminados o la inhalación de partículas presentes en el aire. Algunas de las enfermedades que pueden transmitir las cucarachas incluyen:

Salmonelosis: Las cucarachas pueden transportar la bacteria Salmonella en su cuerpo y patas después de estar en contacto con alimentos contaminados. La transmisión ocurre cuando las cucarachas entran en contacto con alimentos o utensilios de cocina, lo que puede resultar en la contaminación de los alimentos y causar infecciones gastrointestinales en los seres humanos.

Enfermedades gastrointestinales: Las cucarachas pueden ser portadoras de diversos patógenos, incluyendo bacterias como Escherichia coli (E. coli) y Campylobacter, que pueden causar infecciones gastrointestinales en las personas. Estas bacterias se transmiten al contaminar los alimentos y utensilios de cocina con las heces o secreciones de las cucarachas.

Alergias y asma: Las cucarachas liberan partículas y excrementos que pueden desencadenar reacciones alérgicas en algunas personas, especialmente en aquellas que son sensibles a los alérgenos de las cucarachas. Estos alérgenos pueden desencadenar síntomas de asma, como dificultad para respirar, tos, sibilancias y congestión nasal.

Dermatitis: El contacto directo con cucarachas o sus secreciones puede provocar irritación de la piel y dermatitis en algunas personas sensibles.

Moscas

Las moscas son conocidas como vectores de varias enfermedades debido a su capacidad para transportar microorganismos patógenos en su cuerpo y patas. Al posarse en superficies contaminadas, como desechos o restos de alimentos en descomposición, pueden recoger microorganismos y transmitirlos a los humanos. Algunas de las enfermedades que pueden transmitir las moscas incluyen:

Diarrea y enfermedades gastrointestinales: Las moscas pueden transmitir bacterias como Escherichia coli (E. coli), Salmonella y Shigella, que son causantes de infecciones gastrointestinales. Estas bacterias pueden contaminar los alimentos y utensilios de cocina al posarse sobre ellos, lo que puede resultar en enfermedades diarreicas en los seres humanos.

Conjuntivitis: Las moscas pueden ser portadoras de bacterias que causan conjuntivitis, una inflamación de la membrana transparente que recubre la parte frontal del ojo. Estas bacterias se transmiten cuando las moscas entran en contacto con los ojos o secreciones oculares de una persona.

Infecciones cutáneas: Al posarse sobre heridas abiertas, las moscas pueden transferir bacterias que pueden causar infecciones cutáneas, como foliculitis o forúnculos.

Infecciones parasitarias: Algunas especies de moscas, como las moscas tse-tsé y las moscas de la carne, transmiten parásitos que causan enfermedades como la enfermedad del sueño y la miasis, respectivamente.

Gusanos intestinales: Las moscas también pueden transmitir gusanos intestinales, como los gusanos del género Sarcophaga, que se pueden ingerir a través de alimentos contaminados por larvas de moscas.

Chinches

Las chinches son insectos que pueden transmitir algunas enfermedades, aunque su papel como vectores de enfermedades infecciosas es limitado en comparación con otros insectos, como mosquitos o garrapatas. Sin embargo, las chinches son conocidas principalmente por causar molestias y reacciones alérgicas en las personas debido a sus picaduras. Algunas de las afecciones asociadas con las chinches incluyen:

Reacciones cutáneas: Las picaduras de chinches pueden provocar irritación en la piel, enrojecimiento, inflamación y picazón intensa. Estas reacciones pueden variar en gravedad dependiendo de la sensibilidad de cada persona.

Infecciones secundarias: Al rascarse intensamente las picaduras de chinches, existe el riesgo de introducir bacterias en la piel, lo que puede provocar infecciones secundarias.

Es importante destacar que las chinches no se consideran vectores significativos de enfermedades infecciosas graves, como ocurre con los mosquitos y garrapatas. No se ha demostrado que transmitan enfermedades como el VIH, hepatitis o enfermedades transmitidas por la sangre.

El principal problema asociado con las chinches es su capacidad de infestar los hogares y causar molestias significativas. La presencia de chinches requiere de medidas de control y eliminación efectivas, como la contratación de profesionales en control de plagas, limpieza exhaustiva de la ropa de cama y muebles, y sellado de posibles puntos de entrada.

¿Cómo evitar plagas en el hogar?

Para evitar plagas en el hogar, es importante tomar medidas preventivas que ayuden a mantener un ambiente limpio y poco atractivo para los insectos y roedores. Aquí tienes algunas recomendaciones:

Mantén una buena higiene: Mantén tu hogar limpio y ordenado. Limpia regularmente todas las áreas, prestando especial atención a la cocina, los espacios de almacenamiento de alimentos y los rincones difíciles de alcanzar. Recuerda limpiar los restos de comida, lavar los platos y sacar la basura regularmente.

Sella las grietas y aberturas: Inspecciona tu hogar en busca de grietas, aberturas y puntos de entrada potenciales para las plagas, como puertas, ventanas, tuberías y cableado. Sella cualquier abertura con masilla, silicona o materiales de sellado adecuados para evitar que los insectos y roedores ingresen.

Almacenamiento adecuado de alimentos: Guarda los alimentos en recipientes herméticos para evitar que las plagas accedan a ellos. Asegúrate de que los envases estén bien cerrados y limpios. No dejes alimentos expuestos fuera de la despensa o la nevera.

Elimina la humedad: Las plagas, como los insectos y los hongos, se sienten atraídos por la humedad. Asegúrate de que no haya fugas de agua en tu hogar y mantén los espacios bien ventilados para reducir la humedad. Repara cualquier problema de plomería o filtraciones de inmediato.

Mantén el jardín y el patio limpios: Si tienes un jardín o patio, mantén la vegetación bien cuidada y libre de maleza. Retira los desechos vegetales y mantén los contenedores de basura cerrados y limpios. Evita el estancamiento de agua en macetas o recipientes al aire libre.

Inspecciona y limpia regularmente: Realiza inspecciones periódicas en tu hogar para detectar cualquier signo de plagas. Presta atención a las áreas propensas a la acumulación de desechos, como sótanos, áticos, garajes y armarios. Si encuentras indicios de plagas, toma medidas inmediatas para controlar la situación.

Recurre a profesionales en control de plagas: Si tienes una infestación persistente o una plaga que no puedes manejar por ti mismo, es recomendable contactar a profesionales en control de plagas. Ellos tienen los conocimientos y las herramientas adecuadas para identificar y controlar las plagas de manera efectiva.

Siguiendo estas medidas preventivas, puedes reducir significativamente las probabilidades de tener plagas en tu hogar y futuras enfermedades. Recuerda que la prevención y la limpieza regular son clave para mantener un entorno libre de plagas.