Tragedia migrante en Juárez, advierte Riva Palacio, resultado de una política de exclusión e indignidad
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Para el columnista no sólo AMLO es responsable de la muerte de los 39 migrantes en la estación del INM, también lo son Biden y Trump
A diferencia de Carlos Loret de Mola quien acusa al presidente Andrés Manuel López Obrador como el único responsable político de la última tragedia migrante ocurrida en Ciudad Juárez, para Raymundo Riva Palacio se trata de una responsabilidad que comparte con Joe Biden y Donald Trump.
De acuerdo con el artículo publicado hoy por el periodista, lo ocurrido este martes en una estación del Instituto Nacional de Migración (INM) es el resultado del “desastre” de una política migratoria binacional, es decir, entre México y Estados Unidos.
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Las decisiones que han tomado tanto AMLO y Biden, y en su momento Trump, como presidentes, han creado una “política de exclusión e indignidad” en materia migratoria.
“Treinta y ocho muertos, hasta ahora, son su timbre de vergüenza y responsabilidad política... Biden no ha dicho nada. Trump, tampoco. López Obrador se lavó las manos”, culpa Riva Palacio.
La migración no es un problema nuevo que comparten México y EU, pero en los últimos años ha ido en aumento en el contexto de la violencia, inseguridad y desempleo que padecen los países centroamericanos, de donde son la mayoría de quienes cruzan el país con destino al sueño americano, pero también hay personas de Cuba, Haití y Venezuela.
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Ken Salazar, actual embajador de Estados Unidos en México, desde 2013, cuando era secretario del Interior en el gobierno de Barack Obama, se comprometió a reforzar la seguridad fronteriza y la infraestructura, recuerda el periodista.
Ese compromiso, sin embargo, no tocaba el asunto de fondo, pero sí la expulsión de migrantes. De hecho fue la de Obama la administración que más indocumentados ha deportado.
De acuerdo con datos de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP, por su sigla en inglés), de 2009 a julio de 2016, la administración de Obama deportó a 2 millones 858 mil 980 personas. Mientras con Trump fueron poco más de 900 mil en cuatro años.
EL ERROR DE MÉXICO
En 2018, previo a su oficialización como subsecretario de Gobernación para Derechos Humanos, Alejandro Encinas prometió que el gobierno de López Obrador tendría una política migratoria más humanitaria que incluía visas de trabajo y refugio.
“Las marchas de migrantes hondureños habían comenzado, pero esas palabras que abrían la puerta al paraíso las aceleró. La política humanista y de brazos abiertos llegó al extremo de facilitarles transporte, agua y comida a los inmigrantes en su paso por México hacia Estados Unidos”, menciona Riva Palacio.
Poco tiempo después se dieron cuenta de que habían cometido un error, dijo un colaborador de Olga Sánchez Cordero, quien era la secretaria de Gobernación.
“Lo que provocaron fue que se aglomeraron en la frontera con Estados Unidos decenas de miles de inmigrantes y las detenciones comenzaron a subir súbitamente”, añade el periodista.
En 2019 llegó “el jalón de orejas” por parte del gobierno estadounidense, entonces encabezado por Donald Trump, cuyo yerno y responsable extraordinario de la política con México, Jared Kushner, le advirtió a López Obrador que debía hacer algo y había consecuencias.
El aviso, que el presidente AMLO ignoró, se convirtió en un ultimátum en 2019 cuando Trump anunció “que si para el 10 de junio no frenaban la inmigración ilegal, impondría aranceles a los productos mexicanos”.
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Recuerda Riva Palacio que debido a esa mala decisión de “brazos abiertos” y ante la demanda del entonces presidente de EU tuvieron que cambiar radicalmente esa política y López Obrador “despachó a 27 mil soldados y Guardia Nacional a la frontera con Guatemala. Trump corrió su frontera sur del Río Bravo al Suchiate”.
Sin embargo, para el periodista, “la semilla de lo que sucedió en Ciudad Juárez” se sembró desde el 2018 cuando entre Ebrard y Mike Pompeo, secretario de Estado, arreglaron en secreto el acuerdo “Permanecer en México”, es decir, “quienes buscaran asilo en Estados Unidos, esperarían el trámite en México”.
TÍTULO 42, DE LA CRÍTICA A SU ACEPTACIÓN
Dentro de las políticas mencionadas por Riva Palacio se encuenta el Título 42, implementado por Trump durante la pandemia para “restringir todo tráfico transfronterizo que no fuera esencial”.
Cuando Biden llegó al gobierno “denunció las políticas migratorias de Trump como ‘crueles y excluyentes’ y planeó cancelar la política del Título 42”, añade.
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Sin embargo, poco le duró el gusto a Joe Biden “ante la realidad política electoral y la migración que no cesaba” y en octubre del año pasado lo implementó “y comenzó a negociar con México un mayor volumen de inmigrantes centroamericanos para ‘permanecer’ en este país en espera de sus trámites”.
El periodista aduce que México le ha estado haciendo el trabajo sucio a EU e incluso el país “ha servido como el hoyo negro de las necesidades políticas de Trump y Biden”.
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“En enero, en vísperas del arribo de Biden para la cumbre de líderes norteamericanos, López Obrador aceptó recibir 30 mil inmigrantes más cada mes de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela”, refiere Riva Palacio.
