‘Ya me cansé’ y la ‘verdad histórica’; las frases de Murillo Karam que cimbraron a México
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El caso de Ayotzinapa sigue siendo una fuerte herida para el país, y las pronunciaciones del ex procurador no lograron apaciguar a las familias afectadas.
La tarde de este viernes 19 de agosto, fue detenido el extitular de la desaparecida Procuraduría General de la República (PGR), Jesús Murillo Karam, en relación a la búsqueda de los 43 estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa, caso que marcó a México en diversos aspectos, sin embargo, resaltó la inquietud, el miedo y la indignación colectiva.
Durante su tiempo en la PGR, en el sexenio del expresidente Enrique Peña Nieto, Murillo Karam, también militante del Partido Revolucionario Institucional, se encargó de coordinar la investigación sobre la desaparición de los normalistas, sin embargo, desempeño dejó inconformes a las familias afectadas, además de a un país entero.
La gota que derramó el vaso fue 33 días después de que la PGR tomó la investigación de los hechos ocurridos entre el 26 y 27 de septiembre de 2014, cuando el exprocurador afirmó “sentirse cansado” en cuanto a la escrupulosa búsqueda.
“Muchas gracias. Ya me cansé”, sentenció, en medio de una conferencia de prensa donde interrumpió a uno de los periodistas. Así, pretendía dar por terminada una sesión de preguntas que apenas lleva 30 minutos.
Luego, las críticas de su comentario lo forzaron a reiterar que estaba harto de la violencia en el país, y “agotado físicamente” luego de trabajar “incansablemente” por encontrar a los jóvenes desaparecidos. “Cuando dije ‘estoy cansado’, es que estoy cansado de eso, de una violencia brutal... Lo he vivido, lo tengo todos los días. Sí me cimbra. Además de que tenía yo 40 horas sin dormir”, sopesó
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Ni un millón de defensas lograron quitar esta mancha de su historial; hoy, enseguida de su detención, se volvieron tendencia en redes sociales los hashtags “#YaMeCansé” y “#VerdadHistórica”, otra de sus célebres frases.
Ésta sucedió en una reunión que sostuvo con los estudiantes de Ayotzinapa, a quienes les presentó una supuesta “verdad histórica” sobre el paradero de los normalistas desaparecidos. En su versión, apuntó que los jóvenes fueron secuestrados por un grupo delictivo, además, algunos de ellos fueron privados de la vida, incinerados y arrojados a un río.
En ese entonces, culpó al grupo “Guerreros Unidos” por su complicidad con los policías municipales de Iguala y Cocula, señaladas como responsables de la desaparición. Mientras, sostuvo que en ningún momento hubo participación de policías estatales o federales, tampoco presencia del Ejército Mexicano.
Con el paso del tiempo, las declaraciones de Murillo Kuram fueron desmentidas.
La “hoguera” improvisada por el grupo delictivo habría alcanzado una temperatura de 1600°C, y fueron incinerados los 43 estudiantes en ella. Empero, durante las fechas en las que se señaló el acto no se registró ningún evento de tal magnitud, mucho menos fue posible que se cremaran los cuerpos en 15 horas.
Sí hubo militares que monitorearon, en tiempo real, todos los movimientos de los estudiantes, desde que salieron de la escuela hasta el evento en sí; se reconoce que hubo un infiltrado entre ellos, el soldado Julio César López Patolzin, y fueron vigilados con detalle.
Por otro lado, no sólo intervinieron policías municipales y federales, sino, ministeriales y estatales de Huitzuco y Tepecoacuilco. Por ello, familiares señalaron a Murillo Karam por no intervenir apropiadamente durante el hostigamiento del cual fueron víctimas los 43 estudiantes.
Así, hoy se reconoce la investigación liderada por Murillo Karam como “fraudulenta”, además de ser responsable político de la misma. Apenas esta semana, el subsecretario de la Comisión de la Verdad y Acceso a la Justicia (COVAJ) del caso Ayotzinapa, Alejandro Encinas, calificó la matanza como un crimen de Estado.
Lo que fue señalado como responsabilidad del grupo delictivo Guerreros Unidos, también se le adjudica a diversas instituciones del Estado.
“No hay indicio alguno de que los estudiantes se encuentren con vida, por el contrario, todos los testimonios y evidencias acreditan que éstos fueron arteramente ultimados y desaparecidos”, sentenció Encinas.
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Con información de Milenio, El Financiero e Infobae.
