‘Aquí todos caben’. Los retos del nuevo gobernador de Coahuila

Sin duda que a los coahuilenses nos gusta la democracia, pero sin virtud, y es lo que nos pierde.

La barnizada del anterior domingo fue un ejercicio que llevó a 1.3 millones de ciudadanos a ejercer su voto y confirmar la teoría de una elección negociada desde diciembre de 2022, sobre todo en la designación de candidato de Morena a la gubernatura, este dato fue confirmado por Dante Delgado en entrevista del 6 de junio y soportado por las múltiples señales que fueron descritas en un anterior artículo por este charro.

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Hubo ganadores y perdedores. Del lado de estos últimos, Morena aunque creció en votación perdió por más de 20 puntos contra la alianza coahuilteca. Lenin hasta en su casa fue apaleado y el PAN fue pulverizado por sus simpatizantes que dieron respuesta así a la nefasta convivencia con el PRI, su enemigo de toda la vida.

Por el lado de los ganadores, sin duda el clan del moreirato se llevó todas las canicas, el PT creció como nunca lo hubiera imaginado y el PRD con tan sólo 3 militantes, es decir, 2 sobrinos y una comadre, obtuvo dos curules, aunque prestadas.

Lo que sería el laboratorio para el 2024, es decir, el Estado de México, fue transferido a Coahuila en un juego siniestro en el que participaron, por una parte, López Obrador y, por la otra, Rubén “N”.

Para López Obrador, con sus jugadas de última hora para tratar de unir a la izquierda, generó la lección a las corcholatas de que solamente quedando contentos con los resultados de las encuestas de selección y dispuestos a negociar posiciones, se podrá continuar con el modelo de la 4T.

Para Rubén “N” la estrategia de ordenar el mayor número de votos para el PRI, a como diera lugar a través de sus operadores o coordinadores electorales (vulgo mapaches), resultó efectiva con dos objetivos: el primero, aparte de imponer al 4to Moreira en el poder, fue demostrar que el pueblo aprueba la gestión de su gerente de negocios para llevarlo a otros fines y, el segundo, apoderarse en breve del PRI en su conjunto, dejando a Alito, el obediente, para cubrir las facturas de la derrota en el 2024. Esto, al tiempo.

Ahora la carga viene para el elegido de los dioses, quien tendrá dos lastres nomás de entrada a sus funciones y en las que puede ser relegado al papel que tuvo Riquelme durante seis años en el cuidado de los negocios de sus patrones.

La alianza que firmó principalmente con el PAN no fue de fondo y sólo fue de forma, es decir, conformar un gobierno en el que incluya a panistas, también que se sigan regalando notarias y darles cabida en algunos organismos “autónomos”.

Desafortunadamente para Coahuila, no entraron en esos acuerdos las propuestas de gobernanza y desarrollo, necesarias para dejar de ser un estado que recibe los despojos y además del que aprovechan los recursos compañías extranjeras como Constellation Brands, que cada día está secando más a los 5 Manantiales. Haya cosa.

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Manolo refiere que su estrategia como alcalde fue involucrar a la sociedad civil en el Gobierno, sin embargo, los resultados que se dieron en la alcaldía refieren una complicidad de negocios que fueron más importantes para los que concurrieron al experimento, que las necesidades de la ciudad, como muestra: las condiciones del transporte público, la falta de vialidades nuevas y el narcomenudeo en las colonias.

Para gobernar bien es necesario tener la posibilidad de escoger al equipo que va a hacer frente a los grandes temas, y esa será la primera prueba del nuevo gobernador frente a un patrocinador que está acostumbrado a ser él, y solamente él, quien dice quien sí y quien no. Si esto sucede, será punto menos que imposible que Manolo compruebe que el moreirato no existe.

Por otra parte, al ganar la propuesta de “Pa’ delante”, quienes pierden seremos los que teníamos esperanzas en conocer a las ratas que nos endeudaron, a los que se robaron el patrimonio y pensiones de los maestros, a los criminales que permitieron que haya más de mil 500 desaparecidos en Coahuila o que operaran impunemente grupos del crimen organizado en esta tierra.

Hace unos días, en una entrevista, Manolo manifestó que en su gobierno “todos caben”. Ojalá que también los valores como la virtud, la ética y la justicia. Ya veremos.