Coahuila: Señales de una elección negociada

El ambiente electoral de Coahuila atraviesa por nubes de tragedia, generadas por 18 años de sumisión y hechizo.

Si los ciudadanos lo permiten, podríamos estar en la antesala de la realización del sueño dorado de Rubén “N” y llegar a 24 años de moreirato para perjuicio del estado.

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Los cómplices del moreirismo, esos que los han dejado quedarse con el botín principal, han hecho hasta lo imposible por esa continuidad que les permite enriquecerse con el patrimonio estatal y asegurar a sus descendientes hasta la cuarta generación.

Quien imaginaría que detrás del bailarín morara una mente siniestra y opresora que no quiere dejar el poder y se aferra, a como dé lugar, a este mareador efecto y de esa manera borrar el pasado de corrupción, impunidad, crimen y desapariciones yendo pa’delante.

Múltiples son las señales que desde 2022 fueron confirmando una elección negociada en el estado, unas obvias, las otras escondidas.

SEÑAL PRIMERA. Después de los recorridos de Mejía Berdeja al estado, a fin de sondear su posible candidatura y de la popularidad despertada y también el nerviosismo, vino la primera negociación en diciembre del pasado año, a fin de escoger como método el de las encuestas en la selección de candidato de Morena. Y surge Guadiana como triunfador, vía negociación AMLO-Rubén-Monreal, para que este desgastado personaje representara al partido y fácilmente casi hablar de zapato en las elecciones contra la alianza nefasta del PRIAN, los tres sobrinos y la comadre del PRD.

Con ello se pretendió desanimar a Mejía y acabar con el cuadro opositor, ya que el PT, el Verde y Movimiento Ciudadano difícilmente aceptarían a “El Tigre” por la alianza nacional con Morena, pero fallote: ¡Que lo apoya Alberto Anaya!

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SEÑAL SEGUNDA. Ante la pasada campaña de Guadiana, quien cumplía el cometido pactado, y la necesidad de AMLO de apoyo legislativo para el plan B electoral, vuelven las negociaciones y la distribución de curules locales del centro de alabanza, las cuales quería agandallar la alianza PRIANISTA, y se colocan restos de candidatos de Morena a fin de quedarse con algunas migajas.

Desafortunadamente surge la propuesta de Movimiento Ciudadano de lanzar candidatos al Congreso Local a través de perfiles frescos, y al mismo tiempo por los candidatos del PT con gente experimentada y popular. Y otra vez se complican las cosas para la cúspide negociadora.

Fue así como tuvo que salir Rubén “N” para acusar a MC de tener nexos con el crimen organizado, afín de apoyar a sus polluelos y su muchachito “Manny, el constructor”.

En eso estaban cuando en el norte sopla el viento y Leocadio y la CTM de Piedras Negras declaran apoyar a “El Tigre” Mejía como gobernador y a Jacobo Rodríguez, de Morena, para diputado local; y esto acabó con el cuadro armado en esa región. Las alarmas se empezaron a encender en el PRI-Cofradía, porque no gobierno.

SEÑAL TERCERA. Precisamente a ese apuro, derivado del crecimiento de la estrategia de “El Tigre” de ir por la gente, no por la militancia, e ir ya acercándose a Manolito, desde la dirigencia del PRI se generan dos negociaciones a cambio: por parte de la primera mandan a Velasco a destrabar la alianza de Lenin con el Verde y su entrega a Morena, y por la segunda obligan a Beto Anaya para que apoye a Guadiana al cuarto para las doce de la contienda.

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Sin embargo, la reacción inmediata del electorado es muy distinta al planeado por las dirigencias partidistas y en tan sólo dos días generó un efecto boomerang en contra de Guadiana y a favor de “El Tigre”, y la chalupa y lotería.

A estas alturas, un movimiento como el generado por la dirigencia de Morena a orden de AMLO puede crear un acomodo en la ecuación y su fórmula, que ni el mismo Mejía hubiera imaginado, recordemos que el coraje y la desilusión son también motivadores a la hora de votar, amén del hartazgo.

ÚLTIMA SEÑAL. Será la generada por usted a la hora de votar y la necesaria reflexión sobre su futuro, sus hijos, sus amigos, familiares y vecinos. Esta no es otra elección más, sino una en la que se puede vencer a la sumisión y a su vez enviar un mensaje a la intolerancia, las desapariciones, la corrupción y la injusticia.

Que sus motivadores sean alentados por lo que hay en su corazón y en su pensamiento, recuerde que un mal gobierno durará al menos seis años y no hay vuelta ni remedio.

Salga a votar y hágalo con alegría, entusiasmo y la satisfacción de haber elegido la mejor opción para lo que vendrá. Recuerde, a decir de Neruda: “usted es libre de hacer sus elecciones, pero es prisionero de sus consecuencias”.

Por un Coahuila insumiso.