DOMINGOS EN LA ALAMEDA

¿Qué es la cultura? “Todo aquello que hace de la vida algo digno de ser vivida”. T.S. Eliot.

La bella Alameda, el paseo dominical de muchos saltillenses, nuestro “Central Park” por decirlo de algún modo; frecuentada en especial por sectores de la sociedad de ingresos medios o bajos, donde predominan los rostros morenos, son los saltillenses del sur, nada que ver con quienes asisten a los lugares de moda al norte... otra vez los dos Saltillos.

En este bosque maravilloso es común observar en sus jardines escenas de parejitas recostadas o jugando luchitas, familias compartiendo la comida o algún refrigerio, niños corriendo, sin faltar los vendedores de una variedad de golosinas: paletas, nieve, raspados, botanas de frituras, y desde luego el clásico globero. Ocasionalmente, uno se topa con personas que transmiten mensajes religiosos o políticos, sin que al parecer gocen de una buena recepción por parte de los paseantes, algunos de los cuales gustan pasar un rato en la emblemática “Fuente de las Ranas”.

Lo anterior es lo tradicional, sin embargo, la Administración municipal ha venido presentando una serie de eventos, culturales en la explanada donde se encuentra la biblioteca del estado Melchor Múzquiz, a cargo de mi amigo, el escritor y poeta, José Domingo Ortiz.

Los eventos que he presenciado han sido variados: guitarristas de rock, obras de teatro, como la “Del Fantasma de la Media Noche”, grupos folclóricos, tríos, sobresaliendo la agrupación “Cenzontle” –en su página de Facebook se escribe Zenzontle–, dirigida por el profesor Héctor Velázquez, que ha hecho una estupenda a labor durante décadas. De las actuaciones que me ha tocado presenciar, la de este grupo me ha parecido la más completa y profesional, tomando en cuenta la calidad de sus interpretaciones, de su vestuario, y algo importante, ya que además de la participación de adultos y jóvenes, los niños también actúan, asegurando la continuidad de esta agrupación en el futuro.

Asimismo, puedo mencionar a otro grupo de danza regional de nombre “Alegoría y Esencia”, en cuya presentación sucedió un hecho que me llamó la atención, pues sus integrantes debieron realizar el cambio de vestuario a la intemperie, en uno de los corredores de la Alameda, a la vista de todos. Aquí se presenta un área de oportunidad para mejorar, proporcionando un lugar adecuado para respetar la dignidad de los artistas. También han actuado grupos de cumbia, raperos, Gabriel Neaves con sus asistentes, dirigiendo dinámicas infantiles, y el pasado domingo la Tuna de la Universidad Autónoma de Coahuila.

El Instituto Municipal de Cultura es el organismo encargado de ofrecer estos espectáculos al público, y para ello, además de los equipos de sonido, se despliegan sillas en la explanada ya mencionada. En este sentido, el liderazgo de Leticia Rodarte representa un cambio positivo respecto al pasado.

Se ha dado un paso importante, y es deseable que con el tiempo, la calidad de los eventos vaya en aumento, contribuyendo así a elevar la educación cultural de la gente, la que cuenta con el potencial para ir mejorando. Se sabe que los recursos presupuestales son limitados y que los recortes suelen afectar en buena medida a las actividades culturales, por ello, es meritorio lo que se viene haciendo.

¿Qué pasaría si las autoridades propiciaran la participación de las personas y empresas económicamente solventes, para que de forma voluntaria aportaran dinero para el fomento de la cultura? ¿De lograrse esto, las aportaciones pudieran ser deducibles de impuestos? La participación privada es importante para el impulso de esta actividad, que junto con la educación son las palancas fundamentales para el desarrollo de la sociedad.

Hace días falleció el artista Guillermo López Gómez, un excelente pintor y un buen hombre, a quien tuve la suerte de conocer en la UAdeC, en la escuela de Artes Plásticas. Poco antes de su muerte, con el profesionalismo que siempre lo distinguió, dispuso de todos los detalles para la exposición de su autoría titulada “Las Carretas de Tlaxcala en Saltillo”, inaugurada recientemente en una de las salas del centro cultural “Vito Alessio Robles”, y que se encuentra abierta al público. Hay que recordar siempre, que la obra de los artistas hace más llevadera nuestras vidas.