El diálogo como inicio de un ciclo y un cambio
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Siempre me han gustado los inicios de ciclos; los veo como la posibilidad de cambiar, mejorar o terminar algo. No hago mi lista de propósitos que se guardan en un cajón y solo generan culpa cuando los encuentro, más bien, comparto mis anhelos con la intención de que las cosas sucedan.
En ese sentido aprovecho estas líneas para desplegar los deseos colectivos para las artes visuales en este nuevo año, que reflejan la voz de muchos miembros activos de la comunidad:
1. Espacios culturales dignos: deseamos que los espacios estén bajo el cuidado y administración de personas responsables, capaces de utilizar los recursos -ya sean muchos o pocos- de manera adecuada para hacerlos dignos, tanto para los artistas como para el público que los visita. Consideramos importante y necesario que los espacios públicos sean gestionados por personas sin afiliaciones sindicales, personas dispuestas a llevar a cabo nuevos proyectos y a colaborar con la comunidad.
2. Oportunidades de gestión para proyectos de otros estados: necesitamos ver lo que está ocurriendo en otros estados, ver la obra de más artistas, observar el trabajo curatorial de diversos gestores. Abrámonos a las posibilidades de conocer lo que pasa afuera de nuestro estado y país, integremos a nuestras agendas obra contemporánea que planteen otras realidades.
3. Convocatorias para integrar las exposiciones itinerantes: Coahuila no es una isla, volvamos a generar exposiciones colectivas integradas por muchas voces, disciplinas y generaciones de artistas que conforman el gran panorama artístico de nuestro estado. Pero también, démosle oportunidad a las exposiciones individuales de viajar a nuestro estado y, porqué no, realizar algún tipo de acción con la comunidad del lugar.
4. Valoremos el trabajo de quienes trabajamos para el arte: Señoras y señores que ocupan los puestos culturales de nuestro estado, ciudad y universidades, así como ustedes perciben un salario por su trabajo, nosotros ofrecemos diferentes productos artísticos que deben de ser valorados económicamente en tiempo y forma digna. Por favor, no pidan proyectos gratis.
5. Trabajo colectivo: Volvamos a construir nuestra comunidad con lazos largos y fuertes dentro y fuera de nuestras ciudades. Con esto, establezcamos dinámicas de visibilidad, apoyo a la creación y expansión de proyectos sin depender de nadie más que de nosotros mismos. Pero también seamos observadores y exigentes con las autoridades.
6. Diálogos horizontales: Deseamos diálogos horizontales entre comunidad y funcionarios culturales. ¿Quieren saber lo que nosotros los artistas, necesitamos? ¿Quiere saber qué es lo que la comunidad percibe de sus espacios? Platique con nosotros, no se quede solo con la agenda que llega a sus escritorios. Estamos aquí para que nos conozcan, para compartir puntos de vista, para conversar y discutir lo que no ha funcionado en periodos anteriores, y para proponer líneas de trabajo diversas, nutridas y dinámicas.
Desde la colectividad, deseamos un gran año, lleno de sacudidas, movimiento y desafíos a múltiples realidades sociales donde se valore nuestro trabajo, se fortalezcan las relaciones y sobre todo que el arte llegue a más y más personas.