Generación ansiosa: depresión y ansiedad invaden a los adolescentes

Opinión
/ 4 abril 2024

El martes de la semana pasada, 26 de marzo, fue publicado el libro más reciente del Dr. Jonathan Haidt, autor y psicólogo social norteamericano, “Anxious Generation” (Generación Ansiosa), alertando el número tan alto de niños con sentimientos de tristeza, pensamientos suicidas y pegados en la pantalla casi todo el día, siendo succionado su entusiasmo por la vida.

Algunos de los datos alarmantes de su libro: Las tasas de depresión y ansiedad entre los adolescentes estadounidenses aumentaron en más del 50 por ciento en múltiples estudios entre 2010 y 2019, escribe el Dr. Haidt. La tasa de suicidio de niños entre 10 y 14 años se triplicó entre 2007 y 2021, según los Centers for Disease Control and Prevention (Centros de Prevención y Control de Enfermedades). La proporción de niñas de preparatoria que consideraban seriamente intentar suicidarse aumentó del 19 por ciento en 2011 al 30 por ciento en 2021.

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Desafortunadamente la llegada de los celulares a manos de nuestros hijos incrementó el riesgo de su salud mental y emocional. Un creciente cuerpo de investigación vincula la aceleración de la crisis a uno de los mayores acontecimientos de este siglo: la llegada del teléfono inteligente. La Dra. Jean Twenge, autora e investigadora del Departamento de Psicología de la Universidad Estatal de San Diego, afirma: “Los teléfonos inteligentes y las redes sociales cambiaron fundamentalmente la forma en que los adolescentes pasan casi todo su tiempo fuera de la escuela”.

La Dra. Twenge advierte que entre mayor tiempo pasan en sus celulares y redes sociales, aumenta el riesgo de estrés, ansiedad y depresión entre los adolescentes. Sin embargo, pareciera que estás exhortaciones son ignoradas por la mayoría de los padres de familia. La presión de que su hijo no sea excluido por los demás, al no tener acceso de tecnología, hace que desde los 10 años la posean y el tiempo que pasan en línea sigue aumentando.

A principios de la década del 2000, los adolescentes de preparatoria veían a sus amigos en persona unas tres veces a la semana. Ahora ha disminuido más del 50 por ciento. En otras palabras, los amigos se ven solamente 1.5 veces a la semana, según los datos del proyecto Monitoring the Future de la Universidad de Michigan. A la vez, el tiempo de pantalla se ha disparado: los adolescentes pasan un promedio de 4.8 horas al día en aplicaciones de redes sociales, incluyendo TikTok, Instagram y Snapchat, según Gallup.

La depresión ha afectado mucho más a los adolescentes que a los adultos en la era de los teléfonos inteligentes, según datos de la Encuesta Nacional sobre el Uso de Drogas y Salud. En otras palabras, casi el 20 por ciento de los adolescentes padeció un episodio muy serio de depresión en el año 2022 y solamente el 8 por ciento de los adultos. El Dr. Haidt nos alerta sobre el alto número de niños y adolescentes que están expuestos a graves problemas de salud emocional.

¿Cómo es posible que nuestros hijos tengan una vida con mayor estrés y ansiedad que los adultos? Según el Informe Mundial de la Felicidad de este 2024, es increíble ver que Estados Unidos ocupa el décimo lugar como el país más feliz del mundo entre los adultos, sin embargo, entre los jóvenes ocupa el puesto 62. Los estadounidenses menores de 30 años se sienten peor sobre sus vidas que los mayores de 50 años. ¿Qué estamos haciendo o dejando de hacer entre nuestros hijos?

Papás, debemos abrir nuestros ojos y analizar el estilo de vida que estamos dando a nuestros hijos. Debemos poner atención en los siguientes puntos:

* ¿Estamos presionando demasiado a nuestros hijos en la escuela? ¿Las expectativas de aprendizaje son adecuadas a su edad y habilidad académica?

* ¿Estamos conectados física y emocionalmente con nuestros hijos? ¿Regulamos el uso del celular durante las comidas y su tiempo libre?

* ¿Sabemos cómo se sienten entre sus amigos? ¿Sabemos su presión para cumplir con sus expectativas de aprobación?

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¿Sabemos cuánto tiempo están en sus redes sociales? ¿Sabemos qué contenidos, en Instagram y TikTok, están expuestos sobre temas de imagen corporal, dieta alimenticia y pensamientos suicidas?

¿Sabemos cuánta ansiedad produce su búsqueda de la perfección? ¿Tiene nuestro hijo obsesión hacia alguna actividad que le produce tristeza por no cumplir sus expectativas?

Papás, tengamos mucho cuidado de lanzar a nuestro hijo al cielo para volar muy alto cuando no es capaz de caminar con seguridad en la tierra, o su caída será muy dolorosa. En la actualidad inflamos tanto a nuestros hijos que piensan que son dueños del universo, pero ante la mínima adversidad caerán tan fuertemente que será muy difícil que se levanten.

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