¡Jueguen! ¿Seguirán bajando las tasas de interés?
Los bancos centrales están bajando las tasas para que la economía agarre vuelo otra vez. Eso significa más créditos, más inversión, más oportunidades. Pero también implica responsabilidad, no es momento de volverse locos
Imagina que la economía es como un partido de futbol. Los bancos centrales son el árbitro del partido. Tienen el poder de frenar el ritmo o dejar que todo fluya. Cuando bajan las tasas de interés, como está sucediendo ahora mismo en muchos países, es como si el árbitro dijera: ¡Jueguen!
Pero, ¿qué son las tasas de interés? Es el costo de usar dinero prestado. Cuando las tasas están altas, pedir un préstamo para una casa o un coche sale caro. Cuando bajan, ese dinero se vuelve más barato. Así que más gente se anima a gastar, invertir o arrancar nuevos proyectos.
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Eso es justo lo que buscan los bancos centrales hoy, es decir, que el balón vuelva a rodar. Después de un rato con el partido medio apagado (por la inflación, la pandemia y las guerras), ahora quieren que las familias compren, que las empresas inviertan, que la economía vuelva a circular.
Aquí es donde se pone interesante. Como mencioné anteriormente, cuando las tasas bajan, los créditos se vuelven más baratos. Si querías comprar casa, coche o empezar un negocio, este puede ser tu momento. Los bancos van a empezar a ofrecer mejores condiciones. Las empresas también pueden pedir dinero prestado más fácilmente y crecer. Y si eso pasa, hay más trabajo, más inversión, más movimiento.
También puede ayudarte si tienes deudas, por ejemplo, es más fácil refinanciar o negociar tasas más bajas. Si lo traducimos al deporte, hay más gente en la cancha, más tiki-taka, más goles.
Sin embargo, como en todo partido, hay que cuidar que el equipo no se confíe. Si bajan mucho las tasas o se hace demasiado rápido, puede regresar el rival más temido: la inflación. Esa que hace que todo te cueste más. Es como si el equipo se fuera al ataque y dejara la portería sola. Si no se controla, los precios podrían volver a subir y dañar a los que menos tienen.
Además, con tasas muy bajas, la gente puede endeudarse de más. Como cuando ves un producto a meses sin intereses, y luego otro, y otro... y terminas con una montaña de pagos sin darte cuenta.
¿MÉXICO JUEGA?
El Banco de México ya empezó a bajar las tasas. No lo hace a lo loco, va paso a paso, viendo que la inflación esté bajo control. Pero sí hay señales de que seguirán bajando en los próximos meses si todo sigue bien.
Esto puede sentirse poco a poco. Si estás pensando en pedir un crédito, tal vez te convenga esperar a que bajen un poco más. O si estás emprendiendo, puedes aprovechar que habrá más apoyo y créditos más accesibles. También puede ser un buen momento para mover tu dinero e invertir con estrategia.
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Sin embargo, apenas es el segundo tiempo del partido. Los recortes de tasa son como hacer un cambio en el equipo, pueden ayudarte a empatar o a remontar, pero si no juegas con la cabeza, puedes terminar perdiendo en un contragolpe.
Este es un momento para moverse con inteligencia, aprovechar el impulso, pero no confiarse. Como en el fútbol, se trata de leer el juego, ver las señales y saber cuándo pasar la pelota o cuándo disparar.
En resumen, los bancos centrales están bajando las tasas para que la economía agarre vuelo otra vez. Eso significa más créditos, más inversión, más oportunidades. Pero también implica responsabilidad, no es momento de volverse locos, sino de jugar bien nuestras cartas.
Como dicen en el beisbol, “esto no se acaba hasta que cae el out 27”. Pues igual aquí, hay que estar atentos, porque este partido económico apenas se está poniendo bueno y todavía nos pueden anotar en contra.
LinkedIn: Ricardo Ozuna