La evolución de la inflación; el precio de la tortilla de 50 centavos en los años 50s a casi 30 pesos hoy

Es la década de los 1950s, temprano, la familia se reúne en la mesa para el desayuno: migas con huevo, frijoles, un vaso de leche-alimento surtido por don “Kiko” Dávila- y pan francés, el que previamente fui a comprar a la tienda de María de León, ubicada en la esquina de las calles de Juárez y Matamoros, a uno pasos de la casa familiar, motivado por el acostumbrado “pilón”; un trozo de piloncillo o unos chicles “Canels.”

Con el fondo musical de la polka “El Circo,” y como en ese tiempo no habían nacido ni Siri ni Alexa, el compadre Medina, desde la XESJ, nos daba la hora para llegar a tiempo a la escuela, sin dejar de lado las jiribillas cuando decía de los muchachos de Palo Blanco, mandaban saludos a las muchachas de Cañada Ancha. Además, este locutor brindaba información de gran utilidad a la comunidad y publicitaba el delicioso café y chocolate del “Oso,” siempre igual.

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En los años 50s la pieza de pan francés se vendía a 10 centavos, el kilo de huevo entre $1.50 y $ 2.00, el litro de leche $1.20, el kilo de frijol, $1.20, y la carne $3.00 pesos. Veamos los precios de esos productos al día de hoy: la pieza de pan francés, $8.00, el kilo de huevo fluctúa entre $30 y $ 55, la leche, se vende entre $15 y $35, el litro, el frijol tiene un rango de $27 y $45, el kilogramo y la carne, $220 pesos, promedio. No podemos pasar por alto el precio de la tortilla de maíz, que en los 50s era de 50 centavos, mientras que actualmente, el kilo se vende entre 20 y 30 pesos.

A la salida de clases del Colegio Ignacio Zaragoza, por la calle de Hidalgo al sur, en la esquina donde hoy se encuentra el Museo de las Aves, un comerciante vendía jícamas a 20 centavos la rebanada; una porción de buen tamaño. Por cierto, aquel “maistro” no tenía ayudante, o sea, que él mismo cobraba y preparaba la fruta, y no recuerdo que se lavara las manos, pero bendita juventud, nunca nos llegamos a enfermar por comer esa delicia. La semana pasada en el centro, el vaso de jícama en cuadritos se vendía en 40 pesos.

En el desaparecido estanquillo “San Luis,” que se localizó en la esquina de Juárez y Bravo, el peso del domingo alcanzaba para comprar un chocolate “Almon Ris,” o un “Tin Larín,” de 40 centavos cada uno, dos jamoncillos de 10 centavos, la pieza, unos coquitos de 20 centavos y una paleta helada del mismo precio.

¿Cuánto costaban los boletos para ver a las estrellas de aquel “Club 45,” de la Liga Central? Entre otros, Louis Saint Claire, Pedro “Charrascas” Ramírez, Silvio Meza, Conrado “Babalú” Pérez, Víctor Medina, “La Bolita,” y lanzadores como Pedro Carrillo, Javier Olallo y Marcelino Solís, quien jugó en las Ligas Mayores. Las entradas en numerado valían $7.00 pesos, sombra $ 5.00 pesos y sol $3.00 pesos. Las damas y los niños pagaban la mitad. En el parque “Francisco I. Madero,” los laterales A y C costaban hace poco $165 pesos, el central B $170 y general $80 pesos.

En los años 50s el salario mínimo era de $6.00 pesos diarios, y el actual $279 pesos. ¿Cuánto se podía comprar con ese dinero antes y ahora? Maíz: antes,12 kilos, hoy, 11 kilos—bolillos: antes 60 piezas, hoy 35—Carne: antes 2 kilos , hoy 1.4 kilos—leche: antes 5 litros, hoy 9 litros—huevo: antes 4 kilos, hoy, 7 kilos, Frijol: antes, 6 kilos hoy, 8 kilos—jícama: antes 30 piezas, hoy 7. Boletos beisbol en sol: antes: 2 boletos, hoy, 3. 5 boletos, Almon Ris: antes 15 piezas, hoy 11 piezas. Son estimaciones. Imaginemos las cifras que tendríamos de no haberse eliminado tres ceros al peso.

La fuente de la información para este artículo procede principalmente de mi asistente personal; Chat GPT, a quien por cierto, formulo las preguntas con amabilidad, pues hay que llevarla bien con la inteligencia artificial, ya que no sabemos que nos depare el futuro. Posdata. La izquierda champañera: Ricardo Monreal y Mario Delgado, disfrutando de vacaciones en lugares de gran lujo en España y Portugal. ¿Por qué no lo hacen en Estados Unidos? Por cinco poderosas razones.