Mirador 27/06/2025

Opinión
/ 26 junio 2025

La bruma se unta a las cosas y les da una apariencia fantasmal. El pintor, sin embargo, no mira eso. Joven, enamorado, la tela que está pintando muestra un paisaje diferente.

La tarde es gris y nebulosa.

El sol ha desaparecido. Se diría que nunca ha habido sol.

La bruma se unta a las cosas y les da una apariencia fantasmal.

El pintor, sin embargo, no mira eso. Joven, enamorado, la tela que está pintando muestra un paisaje diferente. En su cuadro la tarde es clara y luminosa. El sol brilla en lo alto. La primavera se unta a las cosas y les da una apariencia primaveral.

Sucede entonces algo extraordinario. Se va la niebla y el sol reaparece. La bruma se disipa: las cosas vuelven a tomar su ser. La tarde es ahora como la que pintó en su tela el joven pintor enamorado.

Milagro no es ése de la juventud.

Milagro es ése del amor.

¡Hasta mañana!...

Escritor y Periodista mexicano nacido en Saltillo, Coahuila Su labor periodística se extiende a más de 150 diarios mexicanos, destacando Reforma, El Norte y Mural, donde publica sus columnas “Mirador”, “De política y cosas peores”.

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