¡No dejen solo a Manolo Jiménez!

Desconozco el grado de sensibilidad e inteligencia política -con excepción de cuatro- de los integrantes del gabinete legal y ampliado del gobernador Manolo Jiménez Salinas (MJS).

Ahondo en esa ignorancia, para preguntarme: ¿Estarán conscientes de la situación política que vive cada día su jefe MJS? Les comparto: MJS enfrenta una bestia nunca imaginada después de su aplastante triunfo en 2023: está, regionalmente rodeado de gobernadores distintos al tricolor (incluyo al gobernador de Durango, Esteban Villegas, que apareció dando brinquitos de júbilo adolescente en el templete desde el cual, AMLO dio su sexto Informe de Gobierno, el pasado domingo 1 de septiembre). No tiene gente propia en el Congreso Federal y el Senado. Tampoco en el PRI nacional. Torreón y Piedras Negras cocinan ya sus candidatos a la alcaldía para 2027 y la gubernatura en 2029. Gobernadores morenistas están listos para abrir sus billeteras no personales sino públicas y apoyar candidatos guinda a diputados locales en 2026 y a su candidato a gobernador en 2029. Y, por si fuera poco, lo anterior, la estructura del PRI estatal, a pesar de su eficacia profesional, tendría problemas para sacar las tres elecciones próximas.

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¿Habrán reflexionado esos funcionarios sobre la importancia estratégica de su trabajo, no solo para apuntalar el proyecto de MJS, sino para impedir ser recordados por la historia como la generación de priistas que entregó a Morena el último bastión tricolor?

¿Imaginaron esos funcionarios que su trabajo está obligado a generar una rentabilidad electoral que fortalezca el trabajo metódico y sistemático, también electoral, de Mejora -a través sus programas sociales- vinculado al PRI estatal?

Distingo, sin embargo, los dos tipos de rentabilidad electoral: una, la necesaria, pero no tradicional, que aplicaría a los funcionarios de los gabinetes legal y ampliado de MJS. Es el resultado intrínseco de su trabajo profesional que refuerza la cercanía y el respeto a la dignidad de los ciudadanos con acciones (programas, políticas públicas, etcétera) que surgen de las necesidades sentidas de ellos e inciden de manera significativa en sus vidas.

La otra, es la rentabilidad electoral tradicional: monopolio de Mejora y el PRI estatal.

Por ello, pregunto: ante la situación que enfrenta MJS, ¿no sería deseable diseñar un modelo de rentabilidad electoral adecuado a cada dependencia de los gabinetes legal y ampliado y contribuir así, a incrementar las posibilidades de triunfo electoral del PRI estatal en 2026, 2027 y 2029?

Esto implicaría poner al ciudadano común en el centro a partir de tres preguntas: ¿Qué necesidades de los coahuilenses, cubren los programas y/o políticas públicas de la dependencia?

¿Qué estrategias de comunicación pedagógicas -no propagandísticas- utiliza la misma, para dárselas a conocer a esos ciudadanos?, ¿qué mecanismos tiene la dependencia para aprender -desde el punto de vista de los coahuilenses- los alcances del impacto de los programas y/o políticas públicas en la vida cotidiana de ellos?

Las respuestas a estas preguntas obligarían a los responsables de las dependencias a aterrizar las implicaciones de su quehacer cotidiano en personas concretas, primero. Les exigiría también comunicar su trabajo y su impacto de manera sencilla y directa, segundo. Y les forzaría a aprender las distintas maneras como su quehacer incide en las vidas de esas personas, finalmente.

Este ejercicio rebasaría los números fríos impersonales y distantes, rehenes de la propaganda burocrático-oficial, para arribar al corazón de la vida ciudadana de los coahuilenses de los distintos estratos sociales; y establecer con ellos lazos de empatía, confianza y participación desde una visión de presente y futuro compartida para elevar las posibilidades de triunfo en 2026, 2027 y 2029.

El espacio es corto para detallar las características metodológicas de dicho modelo de rentabilidad electoral para cada dependencia; pero más allá de eso, llegó el momento de pensar “fuera de la caja” para que los integrantes de los gabinetes legal y ampliado de MJS entiendan la importancia crítica del momento; la urgencia de apoyar desde su respectiva trinchera con la rentabilidad electoral esperada -que no es igual a realizar un buen trabajo- y la imperiosa necesidad de blindar a MJS y con él a Coahuila. Es decir, no dejarlo solo.