Patrimonio inmaterial de la humanidad
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El próximo 16 de noviembre se cumplen once años de que la cocina tradicional mexicana fuera declarada por la UNESCO como patrimonio inmaterial de la humanidad. Ante esta celebración me permito compartir con ustedes algunos datos sobre este acontecimiento que todo mexicano o mexicana debe saber.
México intentó en dos ocasiones que su cocina tradicional fuera declarada como patrimonio de la humanidad. En el 2005 se realizó la primera solicitud con un expediente titulado “Pueblo de maíz. La cocina ancestral del México. Ritos, ceremonias y prácticas rituales de la cocina de los mexicanos”, de acuerdo con la UNESCO el expediente no contaba con los elementos ni fundamentos básicos para lograr la declaratoria, el documento era muy generalizado y se necesitaba incluir un testimonio que permitiera ejemplificar porque la cocina tradicional mexicana debía ser considerara como patrimonio.
Por esta razón, en el 2010, México presenta un segundo expediente que lleva por nombre “La cocina tradicional mexicana, cultura comunitaria, ancestral y viva. El paradigma de Michoacán”, el cual aborda el uso del maíz, el frijol y el chile y otros productos como la calabaza, la vainilla y el cacao, junto con algunos métodos de cultivo como la milpa y la chinampa, la técnica de nixtamalización del maíz, el uso de utensilios como el metate y el molcajete, además del trabajo de las cocineras tradicionales las cuales son portadoras de una tradición culinaria que se ha transmitido de generación en generación.
Este documento permitió que la cocina tradicional mexicana fuera elevada al grado de patrimonio inmaterial de la humanidad en una celebración realizada en Nairobi, Kenia el 16 de noviembre del 2010. Si bien la declaratoria se basa en un expediente que aborda el trabajo del estado de Michoacán, el cual representa una de las cocinas con más tradición del país, la declaratoria es para todo el territorio mexicano y cada una de sus regiones gastronómicas, así como sus manifestaciones culinarias.
Luego de que, en el 2005, México mostrará interés en que su cocina tradicional fuera declarada como patrimonio, otros países levantaron la mano y comenzó una carrera por ver quién llegaba primero. De esta forma en el 2010 también se reconoce a la gastronomía francesa y años más tarde, en el 2013, se obtienen otras dos declaratorias, la primera de la dieta mediterránea de los países de España, Portugal, Italia, entre otros y la segunda en Japón por medio de la práctica del washoku que hace referencia a una celebración para las fiestas de año nuevo.
Tras la declaratoria de la cocina tradicional mexicana se instaura el Conservatorio de la Cultura Gastronómica Mexicana como organismo consultor de la UNESCO, el cual hasta la fecha tiene presencia en los 32 estados de la República Mexicana por medio de una red nacional de delegados (cocineras tradicionales, chefs, restauranteros, investigadores, promotores culturales y amantes de la cocina tradicional) que se dedican a promover, preservar y difundir la cocina tradicional de sus estados. A través de sus informes cada año se realiza un expediente de actividades que permite que la declaratoria siga vigente y que la cocina tradicional sea considerada como patrimonio de la humanidad.
Lo que más me llama la atención es que la declaratoria de la cocina tradicional mexicana puso en primer plano a las cocineras y cocineros tradicionales de todo el país, como portadores de conocimientos y de la herencia culinaria de diversas comunidades. Este hecho permitió que muchas mujeres y hombres revalorizaran el trabajo que realizaban y entendieran que lo que estaban realizando es considerado como patrimonio de la humanidad.
Todo esto se traduce en la organización de ferias y festivales gastronómicos que impactan en la economía de las cocineras tradicionales, junto con la apertura de restaurantes y negocios propios. También en que estas mujeres tengan la oportunidad de salir de sus comunidades hacia otras ciudades, otros estados e incluso otros países llevando su cocina tradicional y se desarrollen de manera personal. Viva la cocina tradicional mexicana. Recibo sus comentarios en jasc114@hotmail.com. Nos leemos el próximo martes.