El ABC electoral de AMLO para mantenerse en campaña
COMPARTIR
TEMAS
En una choza de Catemaco, Veracruz, pueblo de brujos, están AMLO y sus tres estrategas electorales: Gabriel García H. (GGH), coordinador general de Programas para el Desarrollo y de superdelegados en el país; Carlos Calderón (CC), responsable de las encuestas en la Presidencia y coordinador de Estrategia Digital Nacional, y Raymundo Artiz (RA), director de CFE, Telecomunicaciones e Internet para Todos.
Los cuatro están sentados en el piso. Cada uno ocupa cuatro de las cinco puntas de una estrella dibujada con cal roja sobre el piso de tierra; mientras ésta arde por sus líneas e ilumina la semioscuridad del humilde cuarto.
AMLO está sentado en la 5ª punta para simbolizar su “supremacía sobre los cuatro elementos: tierra, agua, fuego y aire”. Sus 3 subordinados están sentados en el resto. En la última hay un florero vacío para recordar la vigorosa presencia de los integrantes del gabinete de AMLO.
AMLO: Revisemos la estrategia electoral que nos permitirá ganar en 2021 las intermedias; en 2022 la revocación de mandato y en 2024 las elecciones presidenciales.
GGH: Utilizar la presidencia para realizar campaña electoral permanente.
CC: Cumplido.
GGH: Crear un mercado cautivo de 22 millones de beneficiarios a través de programas sociales.
RA: Cumplido.
GGH: Elevar esos programas a rango constitucional para hacerlos presupuestalmente obligatorios.
CC: Cumplido.
GGH: Bajar el presupuesto de los partidos en un 50%.
RA: Por cumplirse.
GGH: Imponer los 4 consejeros del INE.
CC: Por cumplirse.
GGH: Organizar una red de “comités de Defensa de la Cuarta Transformación” para que vigilen las elecciones y defiendan nuestro proyecto político en cada colonia de cada municipio del país.
RA: Por cumplirse.
GGH: Asegurar Señor, su vigilancia personal -con la fuerza del Estado- para evitar fraudes electorales.
AMLO: No te preocupes, Gabriel. Yo me encargo.
GGH: Bien, Señor.
AMLO: Jajaja ¿qué necesidad tengo de hacer mapachadas el día de las elecciones? Ninguna. Me los voy a chingar, igual.
De repente, las llamas de la estrella de cinco puntas alcanzaron un metro de altura.
