Las 128 mil 452 razones para creer que se puede

Politicón
/ 18 diciembre 2016
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El martes 13 de diciembre, Luis Fernando Salazar, senador por mayoría y actualmente con licencia para buscar la candidatura al Gobierno de Coahuila, entregó al Congreso del Estado 128 mil 452 firmas de ciudadanos, a fin de apoyar la Iniciativa Popular para expedir la Ley que crea el “Tribunal Ciudadano por la Justicia”.

¿Y cuál es la trascendencia del caso?, se preguntará usted.

Sencillo, pero muy importante: que luego de 11 años de pasividad y desencanto por la vida política en la entidad, y en medio de una crisis de gobernabilidad, por primera vez se involucran los habitantes de Coahuila en las decisiones públicas.

El fenómeno social va más allá. Que 128 mil 452 coahuilenses, tradicionalmente apáticos e indolentes por idiosincrasia, manifiesten por escrito y en persona su deseo de justicia por los hechos del pasado reciente, es un suceso inédito. De no creerse.

La cifra equivale al 6.2% del padrón electoral del Estado (con fecha de corte al 2 de diciembre de 2016), y supera casi al triple los votos que obtuvieron siete partidos políticos juntos (PRD, PVEM, PT, Convergencia, Nueva Alianza, Socialdemócrata y Primero Coahuila) en la última elección estatal para Gobernador (49 mil 864 entre todos), en 2011.
Reitero: no es poca cosa.

La Iniciativa Popular es un instrumento jurídico muy oculto dentro de la Ley de Participación Ciudadana para el Estado de Coahuila, a través del cual pueden los ciudadanos trasladar su insatisfacción por los resultados normativos en una materia concreta, o su inquietud ante un asunto que no ha sido tratado previamente.

En el tema propuesto por Salazar, se trata de sentar las bases legales para que un grupo de personas ajenas a los partidos políticos puedan investigar, documentar, analizar y denunciar hechos ilícitos relacionados con la contratación de deuda pública, destino y aplicación de recursos.

Y lo más relevante del caso: 98% de las rúbricas totales, es decir 126 mil, son hológrafas. Fueron obtenidas de manera física, de puño y letra. En la calle; en el mundo real.

En épocas donde el apoyo a los demás sólo se manifiesta con likes en el ciberespacio, no exagero al afirmar que se trata de una proeza. En un País donde la solidaridad pareciera restringida a votar por los videos de otros en Facebook para que éstos obtengan un beneficio personal, significa una hazaña.
Tampoco se trata de las peticiones banas que suelen iniciarse a través de la plataforma de Internet Change.org, las cuales generan un falso concepto de movilización e impacto. En ellas, en realidad nadie se mueve y muy poco impactan, pese a la idea de generar soluciones a problemáticas comunitarias. En Change.org, los internautas aparentemente se vinculan entre sí, sin importar las barreras culturales y geográficas, y apoyan causas que les importan. 

Pero muchas veces transitan entre la chunga y el esnobismo.

Tampoco hay que ser ingenuos. La Legislatura LX, mayoritariamente priísta y palera del Gobernador, hará lo necesario para desestimar la Iniciativa Popular recién presentada. Con tal de no admitirla, Francisco Tobías y la bancada completa del PRI, de ser necesario, se esconderían en el baño.

Pero el 4 de junio de 2017 se renuevan las 25 curules. Y ahí se presenta la oportunidad para votar por diputados locales que asuman el compromiso de iniciar el proceso legislativo para materializar el “Tribunal Ciudadano por la Justicia”. Es muy factible. No se peca de candidez cuando se afirma lo anterior.

Cortita y al pie
Desde 2005, año en que Raúl Sifuentes emprendió una campaña denominada “Tu firma sí gobierna”, no existía un antecedente de participación ciudadana similar en Coahuila. En aquella ocasión, sin embargo, ni se logró el mismo número de rúbricas, ni se materializaron las tres iniciativas populares que presuntamente avalaban.

Hoy, en cambio, hay 128 mil 452 personas dispuestas a colaborar, las cuales han sido reunidas en sólo cinco meses, a un ritmo de casi mil firmas al día.

Y ello hace diferente a Luis Fernando de sus correligionarios en la búsqueda de la designación como candidato del PAN a Gobernador. Mientras Guillermo Anaya le apuesta a las encuestas cuchareadas para generar una percepción artificial de popularidad, Isidro López pone todo en la casilla de los perfiles falsos (bots) en redes sociales para simular un apoyo que no son más que algoritmos pagados por anticipado.

Pero ninguno de los dos ha motivado a la gente a participar, el cual debería ser el objetivo principal de los partidos políticos y representantes populares.

La última y nos vamos
Por lo demás, existen 128 mil 452 razones, tangibles y verificables, para creer que Coahuila está despierto y puede cambiar. No sé a usted, pero a mí me parece una excelente noticia de cara a lo que se avecina en 2017.

@luiscarlosplata
 

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