¿Qué sucedió con Xóchitl?: La dejaron sola (2)

Opinión
/ 12 abril 2024

El segundo paso, seguido por los partidos políticos para disminuir la candidatura de Xóchitl, consistió en darle menos dinero para su campaña presidencial (272 millones de pesos) que el destinado a las campañas de senadurías y diputaciones (281 millones) previamente amarradas por los partidos políticos.

En fechas recientes, por petición de la misma Xóchitl, esos recursos subieron de 272 a 430 millones de pesos (Expansión Política: 21-03-2024). Dinero había, pero su aplicación fue a cuenta gotas de color mezquino.

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El tercer paso consistió en nombrar un equipo de campaña cuyos integrantes, en su gran mayoría, habían ganado sus puestos políticos en territorio, porque llevaban el sello plurinominal en la frente. Más aún, algunos como Alejandro Moreno, Rubén Moreira y Jesús Zambrano, portaban ufanos un rosario de derrotas electorales alrededor de sus cuellos.

El cuarto paso, fue no respetar los códigos internos de la coalición Fuerza y Corazón por México (PAN, PRI y PRD) en el caso del acuerdo Coahuila; que planteaba la distribución de posiciones de acuerdo a la votación alcanzada por cada partido en la campaña pasada. Esa fractura, no sólo debilitó al PAN en nuestro estado, sino también dañó la imagen de la misma Xóchitl.

¿Qué dirigente partidista de la coalición blindó a Xóchitl del desaguisado causado por ellos mismos? Ninguno.

Estos cuatro pasos, dados desde la lógica partidocrática, ocurrieron desde el interior de la Coalición Fuerza y Corazón por México. De manera simultánea, pero desde el exterior, el aparato de Estado lopezobradorista colaboró, de la siguiente manera, a pulverizar la candidatura de Xóchitl.

Primer paso, intentó, de manera sistemática, denigrar la integridad moral de la biografía de Xóchitl; cuestionó sus orígenes otomíes, enraizados en la comunidad indígena de Tepatepec en el Valle del Mezquital y puso en duda sus esfuerzos meritocráticos y de género para salir adelante.

Segundo paso, el lopezobradorismo realizó esfuerzos metódicos para demoler su carácter como mujer ética e incorruptible. El número de acusaciones plasmadas en denuncias y demandas en su contra han sido incontables. Ninguna de ellas, justo es decirlo, llegó lejos, porque el objetivo del aparato amloista era manchar la reputación de Xóchitl. Nada más.

Tercer paso, inundó la conversación pública de encuestas -a modo- para hacer la victoria de Claudia Sheinbaum como inevitable. A la par, construyó la percepción -mediante sus editorialistas a sueldo y sus bots en redes sociales- que la campaña de Xóchitl iba en franca debacle. Justo es señalarlo: algunos analistas editoriales y activistas digitales simpatizantes de Xóchitl, sin pretenderlo, cayeron en ese juego.

Cuarto paso, una vez cubiertos los tres flancos de ataque: biografía personal, carácter incorruptible y fracaso inevitable de la campaña, el lopezobradorismo, salivando sacó las garras para pasar al cuarto flanco y destazar a la familia de Xóchitl: ni su hijo Juan Pablo, su esposo Rubén o su hija Diana se salvaron de ese ataque inmisericorde.

Hasta aquí: ¿salió algún dirigente de la coalición de oposición a defender a Xóchitl de estos ataques? Ninguno.

Por los pasos de los partidos de la Coalición Fuerza y Corazón por México; y los pasos del aparato de estado amloista, para disminuir la candidatura de Xóchitl; ésta terminó sola.

¿Fue Xóchitl víctima de las circunstancias? De ninguna manera. Ella no ha tenido la capacidad para mediar entre la fuerza ciudadana que apuntaló su candidatura y la lógica de los partidos políticos.

Tampoco ha sostenido, la resiliencia mental y espiritual para enfrentar a los monstruos del poder, ya disfrazados como partidos políticos o aparato de Estado amloista.

La razón es sencilla: Xóchitl no tiene la vocación de poder sin escrúpulos éticos de ninguna especie, requerida como condición elemental para aspirar a la Presidencia de la República en un país como el nuestro.

Aún así, millones de ciudadanos de clases populares, medias y altas, con la capacidad para reconocer en ella tal cualidad, votarán por su candidatura el próximo 2 de junio.

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