Queta Lavat, Acuña y Ryan O´Neal , los decesos de la semana

Diciembre inició en relación al Séptimo Arte nacional con la triste noticia el pasado lunes 4 del fallecimiento de la primera actriz Queta Lavat a los 94 años de edad.

Prima de la actriz María Elena Marqués, Queta Lavat tuvo la oportunidad de pisar por primera vez un set cinematográfico a los 18 años de edad como extra en el clásico dirigido por el cineasta coahuilense Emilio “Indio” Fernández “La Perla” (1947) del cual fue despedida porque aunque era solo parte de un grupo de mujeres que bailaba en la playa que servía como locación el tradicional tema de “La Bamba” al director no le parecía su físico adecuado para integrarse a ellas, el hecho de que la actriz protagónica, María Elena Marqués, se solidarizó con su prima de abandonar la locación si ella se iba, dejó a Queta Lavat frente a unas cámaras cinematográficas que según la actriz se convirtieron en “amigas suyas por casi cinco décadas más.

Así, para finales de la década de los 40 Queta Lavat obtiene su primera y única nominación a un Ariel a la Mejor Actriz de Cuadro de 1949 por su trabajo en el clásico “Las tandas del principal”, de Juan Bustillo Oro, protagonizada por el primer actor saltillense Fernando Soler de quien recordó en una entrevista “era todo un caballero, y su esposa una dama, a quienes llegó a vistar en su casa del Pedregal” y en los años 50 formó parte del elenco del clásico “Dos tipos de cuidado” (Ismael Rodríguez, 1953), donde compartió créditos con dos de los grande íconos del cine de la Época de Oro de nuestro cine, Pedro Infante y Jorge Negrete para en el año 2018 ser honrada por la máxima distinción de la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas, el Ariel de Oro, por su vasta trayectoria fílmica.

Hablando de talento saltillense, el pasado miércoles 6 de diciembre se conmemoró el aniversario luctuoso número 150 del suicidio en la Ciudad de México del poeta romántico Manuel Acuña, cuyo legado ya alguna vez comentamos en esta columna que en el cine mexicano ha sido abrazado por cineastas como el maestro Jaime Humberto Hermosillo, quien utilizó su célebre “Nocturno a Rosario” para la secuencia final de su clásico de la diversidad sexual “Doña Herlinda y su hijo” (1985) al tiempo que una de las directoras pioneras en nuestra industria, Matilde Landeta, decidió que la última película de su filmografía fuera la biopic titulada precisamente “Nocturno a Rosario” (1992), donde la primera actriz Ofelia Medina dio vida a la musa del poeta interpretado en dicha ficción por Simón Guevara.

La semana terminó con otro deceso, en su caso dentro del ámbito del cine internacional, del primer actor norteamericano Ryan O´Neal, a los 82 años de edad, y de quien de manera oportuna se informó en estos mismos espacios es recordado principalmente por su papel protagónico en el clásico romántico de 1970 “Historia de Amor”, de Arthur Hiller, el cual dio a él y a su compañera, Ali MacGraw, sus únicas nominaciones al Oscar al Mejor Actor y Actriz de su año.

Sin embargo, ese fue solo el inicio de una prolífica trayectoria fílmica que le llevó a protagonizar otros clásicos bajo la dirección de cineastas de la talla de Peter Bogdanovich (en “La chica terremoto”, de 1972, junto a Barbra Streisand, y “Luna de papel”, de 1973, que dio el Oscar a la Mejor Actriz de Reparto de aquel año a su hija Tatum O´Neal) y Stanley Kubrick (como el protagonista del clásico ganador de cuatro Oscars, “Barry Lyndon”, de 1975), así como filmar en México la cinta de acción “El Gran Robo de las Esmeraldas” (Ernest Day, 1981), al lado de los también nominados a la estatuilla Anne Archer y Omar Sharif y los actores mexicanos Enrique Lucero y Manuel Ojeda, entre muchas otras más.

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