Rancho Izaguirre, México mágico y encuentro

COMPARTIR
Lo encontrado en Jalisco distorsiona la realidad
Desde el laberinto de la soledad. Nuestra naturaleza nacionalista empañada. Los acompañantes del poeta Octavio Paz en las calzadas de los muertos. Teotihuacan aparece majestuosa. Intoxicados etílica. Estados alterados de conciencia.
País surrealista. Convivimos a diario con los muertos. Nuestras sombras van al Mictlán. Con noticias familiares. Los seres queridos no acaban de irse. Te jalan los pies en la noche. Llaman a convivir en paz.
Debajo de toda mascara escondemos la tragedia calcinante. La lucha libre representa la dramaturgia del técnico defendiendo el orden cosmológico. Maldad en perene encontronazo. Vuelan por las cuatro esquinas. Tierra, viento, aire y fuego.
Tres en el encordado. Huracarrana en las mismas barbas del réferi. Nosotros somos el cartel de cuatro letras. Nos dedicamos a la compra, trafico y venta de drogas.
Somos hijos, esposos, hermanos, suegros y hasta en navidad ofrecemos aguinaldo, día de reyes. No permitimos la extorsión. Mucho menos el cobro de piso o cuota obligatoria. Como negociantes también tenemos relacionistas públicos. Grabamos mensajes. Los editamos de manera profesional.
A cuenta de escritores fantasmas. Ideólogos del desastre moral. El honor de servir al patrón. Lo encontrado en Jalisco distorsiona la realidad. Ni los casi 200 pares de zapatos acuse de recibo para los desaparecidos.
Los huesos calcinados, las fosas, las pertenencias no cumplen el estado de derecho. Quienes se dan a la tarea de pesquisas rompieron el orden judicial. La propiedad en custodia por las autoridades civiles. No existe delito. Ese centro de capacitación cumple con los estándares internacionales de ISO9000.
Por semana se cubre el salario de 3 mil pesos. Se pueden gastar en la tienda de provisiones. No quedamos a deber nada. Nuestro departamento de contabilidad es responsable social de las sanas finanzas.
México mágico y encuentro. Viva las nuevas tradiciones.