Se puede decir... Que Alito en la cuerda “floja”

Pero no se puede decir... Que se aferra al “poder”
Pero no se puede decir... Que se aferra al “poder”. Este personaje que a gritos y a tamborazos llegó a la presidencia del RIP, perdón PRI, fue no tanto para dirigir a lo que queda del Partido, sino más bien que el Tricolor lo proteja a ÉL de los delitos de los que está acusado, y para eso se está preparando al tratar de convencer a los pocos priistas que le quedan, para que lo apoyen en su pretendida reelección, ya que los verdaderos y sobre todo los dinosaurios de hueso colorado, lo abandonaron, puesto que no lo pueden ver ni en pintura, y fueron los principales y primeros que le pidieron que renunciara al PRI, y al no hacerlo, “”ellos” renunciaron.