Recuerdan a Enrique Alvarez Félix

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/ 22 septiembre 2015

México, D.F..- A 76 años de su nacimiento, el actor mexicano Enrique Alvarez Félix, quien protagonizó las telenovelas `Rina`, `Colorina` y `De pura sangre`, fue recordado en un ciclo de cine en el que se proyectó la película `Los caifanes`, la cual estelarizó.

En el ciclo "Cinema Palacio", celebrado hace un mes y organizado de manera conjunta por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta) y el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), incluyó en su programa el clásico cinematográfico dirigido por Juan Ibáñez, en 1966.

El histrión recreó a `Jaime de Landa", un arquitecto, quien, acompañado de su novia "Paloma" (Julissa), se unen fortuitamente a un grupo de mecánicos, para iniciar un enloquecido recorrido por la Ciudad de México.

El largometraje, inspirado de manera formal en los recién postulados principios del movimiento de la Nouvelle Vague, se hizo acreedor en 1968 a una Diosa de Plata, como Mejor Película.

Enrique Alvarez Félix nació en la ciudad de Guadalajara, Jalisco, el 6 de abril de 1934, producto del primer matrimonio de la diva del cine mexicano, María Félix, con Enrique Alvarez, un próspero fabricante de zapatos.

Por ello, a fin de dar seguimiento a una tradición de las familias de abolengo, Enrique estudió la carrera de Diplomático, sin embargo, cuando entregó a su madre el título obtenido con honores, se dedicó a su vocación: Ser actor.

Separados sus progenitores, Enrique vivió primero con su padre, hasta que María Félix se lo llevó con la ayuda de su entonces esposo, el cantautor Agustín Lara.

A partir de entonces madre e hijo estuvieron muy unidos, aún cuando lo envió a estudiar a Canadá, Estados Unidos y Francia, en colegios militares para que aprendiera a ser disciplinado.

Alvarez Félix se inició en el cine con un pequeño papel en la película `Simón del desierto` (1964) de Luis Buñuel, aunque él se sentía más bien un actor de televisión y teatro.

La fama le llegó cuando protagonizó la película `Los caifanes` (Juan Ibáñez, 1966) y aunque participó en una veintena de filmes, aseguraba que `el cine es un sarcófago que no está en mi vida, lo que existe es la televisión, lo mejor del mundo, y el teatro que está a la altura de cualquier paso, ahí es donde deben estar los actores`.

El actor era un hombre habituado a la lectura y le gustaba viajar, consolidó su participación en teatro con obras como `El hombre de la mancha`, `Alerta en misa`, `Los encantos del divorcio` y `Drácula`; además de varias telenovelas y películas.

Poco afecto a la vida pública, llevaba una existencia discreta porque detestaba el escándalo, que consideraba, no obstante, como el precio que debía pagar el artista por la fama.

Comentaba que desde pequeño vio cómo pagaban su precio las celebridades y cómo su madre enfrentaba esas cosas y aprendió entonces a no darles mucha importancia, ya que siempre se inventan cosas de la gente famosa, pero por suerte no es una celebridad ni nada por el estilo.

En cine participó en filmes como `Los cuervos están de luto` (Francisco del Villar, 1965), `Réquiem por un canalla` (Fernando Orozco y Berra, 1966), `Laberinto de pasiones` (Miguel Moraytia, 1970) y `La casa del pelícano` (Sergio Véjar, 1977).

Nunca actuó al lado de su madre, aunque siempre se tuvo el proyecto en mente y hasta se llegó a trabajar el guión, basado en una novela de Carlos Fuentes, en los años 70.

Alvarez Félix se definía como un actor al que le gustaban las historias sencillas `de amor, familiares, los hechos que la gente puede considerar como suyos, en los que pueda creer`.

Defensor de las telenovelas, decía que éstas trataban temas reales que a la gente le llegaban verdaderamente; además consideraba que a través de este medio podía atraer público y hacía lo que realmente le interesaba hacer: Actuar.

En dicho género destacó con éxito en títulos como `Corazón salvaje` (1966), `El retrato de Dorian Grey` (1969), `Mi rival` (1973) `Lo imperdonable` (1975) y `Rina` (1977), al lado de Ofelia Medina.

En 1980 protagonizó, junto a Lucía Méndez, el melodrama `Colorina`, el cual tuvo éxito a pesar de las restricciones del gobierno al cambiar de horario. Seis años después intervino en `De pura sangre` (1986), en la que causó revuelo al interpretar a un impotente sexual.

Enrique Alvarez Félix falleció el 24 de mayo de 1996, a los 62 años, víctima de un infarto, dejando inconclusa su participación en la telenovela `Marisol`, producida por Juan Osorio y protagonizada por Erika Buenfil y Eduardo Santamarina.

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