The Martian, la nueva aventura espacial del maestro Ridley Scott

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/ 2 octubre 2015

Para el cineasta británico, "la fantasía del espacio es siempre una plataforma maravillosa".

Toronto, Canadá.- "Gravity", "Interstellar" y ahora "The Martian": los astronautas parecen ser los nuevos hérores del cine, según quedó demostrado hoy una vez más con el estreno en el Festival de Cine de Toronto de la última película en 3D del maestro de la ciencia ficción Ridley Scott.

En "The Martian", el director de "Alien" vuelve al espacio aunque, en esta oportunidad, no hay alienígenas a la vista. En realidad, no hay nada a la vista en Marte, donde es abandonado el astronauta Mark Watney (Matt Damon) poco después de que sus compañeros de tripulación, al mando de la comandante Melissa Lewis (Jessica Chastian) abandonan el planeta en medio de una fuerte tormenta, creyendo que está muerto.

Completan el elenco Jeff Daniels como Teddy Sanders, el severo director de la NASA; Chiwetel Ejiofor como el responsable de la misión a Marte; Sean Bean como director de vuelo y Kristen Wiig como la encargada de prensa de la agencia espacial. Kate Mara, Michael Peña, Sebastian Stan y Aksel Hennie, en tanto, interpretan al resto de los tripulantes de la fallida misión a Marte.

"De niño veía muchos westerns, la mayoría protagonizados por John Wayne. Siempre quise contar esa historia, la de un hombre solo ante la naturaleza", afirmó hoy Scott tras la proyección para la prensa. "Nunca hice un western, pero de alguna forma los apliqué a todo lo que hice".

Para el cineasta británico, "la fantasía del espacio es siempre una plataforma maravillosa". Y aseguró que, en este caso, fue incluso más  fácil que filmar películas como "Alien" o "Prometheus" porque si bien el hombre aún no llegó a Marte, la historia, basada en el bestseller de Andy Weir, y para la cual se contó con asesoramiento de la NASA, se apoya en la ciencia, por lo que es "mucho más realista".

Preguntado acerca de "Gravity", el drama espacial del mexicano Alfonso Cuarón que cosechó siete Oscar, Scott prefirió hablar de otro director, Stanley Kubrick. "El gran papá de la ciencia ficción fue Kubrick con '2001: Una odisea del espacio'. 'Alien' estuvo influida por Stanley, nunca lo olvidé. Él fue quien abrió la puerta".

Completamente solo e incomunicado, con comida para unos pocos días y a una distancia abismal de la tierra - el envío de una misión para rescatarlo demoraría cuatro años-, Mark deberá rebuscárselas para sobrevivir en un lugar inhóspito y desconocido. Lo que, por otra parte, logra con un ingenio sorprendente y un humor a prueba de calamidades.

Apoyado en un guión muy sólido, Matt Damon se luce como comediante brindando varias escenas de "comic relief" en una situación a todas luces desesperante. Es así como, tras lograr germinar por primera vez papas en Marte, grita a todo pulmón: "¡Soy el mejor botánico de este planeta!" o, tras inventar un dispositivo para obtener agua, exclama: "¡Esto es para ti, Neil Armstrong!", en referencia al primer astronauta que pisó la luna.

Damon aseguró que no le presentó un desafío excepcional actuar solo en casi todas las escenas. "Nunca le presto demasiada atención a los demás actores, por lo que...", dijo en broma, aunque luego agregó: "Sabía que iba a tener a Ridley (Scott) a mi lado todo el tiempo, eso me tranquilizó".

Por su parte, Chastain confesó que no sabía nada del espacio, pero que para componer a la comandante Lewis visitó el centro espacial de la NASA en Houston, donde le sirvió conocer "el lado humano, más que el científico" de la navegación espacial. "Lo importante para ellos en el espacio es mantener lazos con la tierra".

Sin embargo, aseguró que uno de los motivos por lo que aceptó el papel es que se moría de ganas de filmar las escenas que simulan la falta de gravedad en el espacio. "Me divertí mucho. Es como volver a ser niño. No quiero ir al espacio, pero me gustó poder hacer como si", afirmó.

"Lo ridículo de este trabajo es que somos adultos haciendo esto", añadió  Damon, que aseguró que por momentos se sintió absurdo tratando de imitar los movimientos de un astronauta. "Más allá de lo grandes que son estas producciones, a fin de cuentas te sientes como un niño jugando en su cuarto, imaginando que está en el espacio".




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