Estrena Arcand "L'Age des Ténèbres" en el TIFF

Toronto, Canada.- Las dos primeras películas se han convertido en dos de las más conocidas de la cinematografía canadiense y han tenido una fuerte resonancia internacional, especialmente la segunda que en 2004 alcanzó el Oscar a la mejor película en lengua no inglesa, el primer filme canadiense en lograr ese galardón.

"Las invasiones bárbaras" reúne a los protagonistas de "La caída del imperio americano" con motivo de la enfermedad de uno de ellos, que está muriendo de cáncer y quiere despedirse de la vida rodeado del amor de sus mejores amigos y su familia.

Ahora, Arcand cuenta en ""L'Age des Ténèbres" la historia de un hombre ordinario, Jean-Marc, que trabaja en una burocracia casi kafkiana en un Montreal del futuro.

El sinfín de quejas y peticiones que Jean-Marc tiene que escuchar diariamente como parte de su trabajo le lleva a inventarse un mundo paralelo de fantasía, "glamour", extravagancia y mujeres opulentas que le apartan de su realidad laboral y familiar.

El film, que ha recogido buenas críticas pero sin llegar al nivel de "El declive del imperio americano" o "Las invasiones bárbaras", está interpretado por el cómico quebequés Marc Labrèche y las actrices Diane Kruger, Sylvie Léonard.

La segunda gala del día es "Blood Brothers", del realizador filipino afincado en Estados Unidos Alexi Tan.

En su opera prima, Tan ha contado con la ayuda del famoso director chino John Woo, que ha producido una película centrada en la ciudad de Shangai en los años 1930.

Con la presencia de las estrellas del cine chino Daniel Wu, Chang Chen y Shu Qi, Tan cuenta la historia de tres jóvenes amigos cuyo descenso en el sórdido mundo criminal de la ciudad pone a prueba la lealtad que sienten los unos por los otros.

Otro de los estrenos del día es "Una novia errante", el segundo largometraje de la joven realizadora argentina Ana Katz en el que ella misma da vida al personaje principal y en el que también participan los actores Daniel Hendler y Carlos Portluppi.

La película, que ya ha sido estrenada en Argentina y se exhibió en el Festival de Cannes, relata con pinceladas de humor, la inesperada ruptura de una pareja al principio de unas vacaciones desde el angustioso punto vista de ella, Inés.

Katz, cuyo primer largometraje fue "El juego de la silla" (2002), señaló a Efe que aunque mucha gente le decía que la segunda película "es muy particular", sobre todo cuando con la primera se le abrieron puertas, y, al contrario de lo que se imaginaba, "este proyecto surgió de manera muy rápida".

"Empezamos a escribir el guión y en seguida me dio empuje para buscar financiación y el elenco, pero siempre pensándolo de manera muy práctica, como algo que se iba que realizar", indicó.

Katz también dijo que el rodaje de la película fue rápido, en cuatro semanas, y sin mayores contratiempos.

En cierta manera, de forma muy parecida a como Woody Allen describió hoy el rodaje de su última película, "Cassandra's Dream", estrenada en la noche del martes y que está interpretada por Colin Farrell, Ewan McGregor y Hayley Atwell.

Durante una rueda de prensa celebrada hoy, Allen se describió como un director "muy vago".

"No tengo la paciencia para practicar con los actores. Lo que quiero es filmar e irme a casa con mi mujer, mis niños, mi clarinete. ¿Por qué vas a utilizar uno o dos días en una escena cuando la puedes acabar en dos horas?", se preguntó.

Tanto Allen como Farrell y McGregor revelaron que el director estadounidense solo repite "dos o tres veces" cada escena.

Para el realizador no hay necesidad y le permite hacer películas con un presupuesto bajo, de alrededor de 15 millones de dólares, "cuando cualquier estúpida comedia estadounidense cuesta 50 ó 100 millones de dólares".

"Mi película no va a perder 15 millones de dólares, a lo mejor 12 millones, pero con los DVD y todo eso al final se puede recuperar. No soy un máquina de dinero y eso es lo que (los grandes estudios de Hollywood) quieren. No lo puedo hacer", explicó Allen.