Compañía de Ópera de Saltillo llena la catedral de canto y público
La interpretación del Réquiem de Mozart, en homenaje a monseñor Francisco Villalobos, abarrotó el recinto religioso
La Compañía de Ópera de Saltillo ya había tenido ocasión de presentar su talento al público de la ciudad. Las galas que ofrecieron durante marzo dieron a conocer la calidad de sus miembros a través de arias y piezas de corta duración. Pero lo que presentaron el pasado miércoles en la Catedral de Santiago, reveló la capacidad del conjunto en su máxima expresión.
Como un homenaje al obispo emérito, Francisco Villalobos, quien falleció el pasado mes de febrero, se llevó a cabo esta semana un concierto en este recinto religioso, donde el recién conformado conjunto interpretó como la obra principal el Réquiem de Wolfgang Amadeus Mozart.
La composición del austriaco, que quedó inconclusa a su muerte en 1791, se interpretó como tal por el coro dirigido por Alejandro Reyes-Valdés, quien también estuvo al frente de la Orquesta Filarmónica del Desierto (OFDC), que prestó a sus músicos para la ocasión y quienes abrieron la velada con la Sinfonía No. 39 del mismo autor.
El Réquiem también contó con la participación de Eliézer Jáuregui, quien estuvo al órgano durante el Introitus, en la cual también sonaron las campanas de la catedral —que a su vez cerraron la obra al finalizar el Lacrimosa—. Con ovación de pie el público agradeció la interpretación del grupo, cuya formación ha estado a cargo de Reyes-Valdés, así como de la soprano Alejandra López Fuentes, el actor y director Gabriel Neaves y el pianista Eric Valdés.
“Es una satisfacción porque el Réquiem de Mozart era algo que estaba en el tintero de mi dirección, y de mi preparación, desde hace mucho. De hecho creo que fue la primera obra de la música clásica que a mí me subyugó, y estamos hablando que yo tenía trece años”, comentó para VANGUARDIA el director.
“A tanta distancia era un sueño para mí el poder hacer el Réquiem de Mozart y que ahora se puede conseguir gracias a esta selección de la compañía y claro al apoyo institucional, y mucho también gracias a la colaboración con la OFDC, que de verdad hoy estuvo maravillosa”, agregó.
Por su parte, Neaves, comentó que “sí habíamos visto esta respuesta del público, pero creo que también está haciendo su chamba el Instituto Municipal de Cultura, porque este resultado de tanta gente que quería venir a escuchar a Mozart es algo impresionante”.
“Yo creo que sentirnos arropados por el Instituto y el Municipio ha sido algo que nos ha permitido deslindarnos de muchas preocupaciones que antes como artista tú tenías que sortear”, añadió la soprano, “ahora todos nos podemos preocupar por una sola cosa, que es la música; se nota cuando se invierte en algo y creo que su inversión ha dado resultados inmediatos”.