¿Cómplice en el silencio? El legado de Alice Munro peligra tras revelaciones de su hija

Artes
/ 9 julio 2024

Andrea Robin Skinner, hija de la autora canadiense, denunció los abusos que sufrió por parte de su padrastro desde niña, mismos que su madre ignoró por años

A menos de dos meses del fallecimiento de la escritora canadiense Alice Munro, el 13 de mayo, su hija Andrea Robin Skinner reveló que sufrió abusos sexuales por parte de su padrastro, Gerald Fremlin, situación que su madre ignoró y ocultó hasta la tumba.

Esta denuncia la realizó a través de una publicación en el periódico The Toronto Star, donde describe cómo iniciaron los abusos cuando tenía 9 años en el verano de 1976, con la segunda pareja de la autora.

La primera persona a quine le contó fue a su madrastra, Carole, esposa de su padre Jim Munro, pero al conocer este último la situación decidió no hacer nada y siguió mandando a la niña a pasar cada verano con Alice y Fremlin.

A los 25 años confesó a su madre los abusos pero Munro lo tomó “como una infidelidad” y abandonó a su pareja brevemente, y siguió viviendo con él hasta la muerte del hombre en 2013, quien intentó chantajear a la familia luego de la acusación.

Si bien en 2005 fue acusado de abusar a Skinner, solo obtuvo una sentencia de dos años en libertad condicional y a no mantener contacto con niños menores de 14 años durante ese periodo. Ella no volvió a tener contacto con su familia.

”También quería que esta historia, mi historia, fuese parte de las historias que la gente cuenta sobre mi madre”, explicó Skinner, “desgraciadamente, eso no es lo que pasó. La fama de mi madre significó que el silencio se mantuvo”.

¿Legado en peligro?

En declaraciones al periódico The Globe and Mail, Robert Thacker, autor de una de las biografías más conocidas de la escritora, “Alice Munro: Writing Her Lives”, reconoció que es uno de los que ignoró los abusos sexuales.

Thacker dijo que en 2005 Skinner le relató las acusaciones de abusos sexuales y del silencio de su madre pero que decidió no incluirlo en su libro. Esto a pesar de la sentencia de ese año, pero el escritor consideró la situación un “desacuerdo” familiar y justificó que su inclusión en la biografía no mejoraría nada.

La columnista de The Globe and Mail Marsha Lederman, calificó de “cataclismo” las acusaciones y defendió que el legado de Munro “debe ser reconsiderado” ante las revelaciones de la hija de la escritora.

Y aunque la librería fundada por Jim y Aice Munro en 1963, Munro’s Books, no tiene relación con la familia desde hace una década, también emitió un comunicado apoyando a Skinner y pidiendo “tiempo” para absorber la noticia y “el impacto que puede tener en el legado” de la escritora.

Por su parte, la escritora Margaret Atwood, cercana amiga de Munro, no ha hecho ningún comentario al respecto.

Con información de EFE.

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