Retrato pintado por un robot se vende por 1 millón de dólares en Sotheby’s
COMPARTIR
La obra subastada, titulada “A.I. God”, superó ampliamente las expectativas, que inicialmente estimaban un valor de entre 120.000 y 180.000 dólares.
El mundo del arte está revolucionado: un cuadro creado por un robot acaba de venderse por la asombrosa cifra de 1.084.800 dólares en una subasta de Sotheby’s. La obra, un retrato del célebre matemático Alan Turing, padre de la informática moderna, fue creada por Ai-Da, el primer robot humanoide considerado artista. Esta venta histórica marca un hito en la industria del arte, abriendo debates sobre la colaboración entre humanos y tecnología en la creatividad.
TE PUEDE INTERESAR: ¿Quién es Matisse? Recordando a un genio de las artes vanguardistas
Ai-Da, desarrollado en 2019, es un robot de aspecto humano capaz de dibujar y pintar de manera autónoma gracias a la combinación de cámaras, un sofisticado software de inteligencia artificial y un brazo robótico especializado. La obra subastada, titulada “A.I. God”, superó ampliamente las expectativas, que inicialmente estimaban un valor de entre 120.000 y 180.000 dólares.
Esta venta histórica no solo destaca el talento tecnológico detrás de Ai-Da, sino también la creciente aceptación del arte digital en el mercado. Sotheby’s, en un comunicado, destacó que este evento “establece un punto de referencia para la venta de arte creado por un robot humanoide”, y subrayó la apertura de una nueva frontera en el mercado global del arte.
Antes de la subasta, Ai-Da presentó su obra en la sede de las Naciones Unidas en Ginebra como un tributo a Turing. Durante una entrevista, el robot expresó su admiración por Turing, “un matemático de gran talento y un pensador original.” Su creador, Aidan Meller, resaltó el simbolismo detrás de la obra, indicando que su nombre, “A.I. God”, representa un cambio en el balance de poder, con decisiones cada vez más en manos de algoritmos en lugar de seres humanos.
“Este retrato no solo homenajea a Turing, sino que invita a una reflexión profunda sobre el papel de la IA en nuestras vidas,” afirmó Meller.
El retrato de Alan Turing realizado por Ai-Da no solo es una proeza tecnológica, sino que también plantea preguntas éticas y filosóficas. Meller explicó que la obra busca invitar al público a cuestionar cómo se utiliza la tecnología en la sociedad y a preguntarse: “¿De qué manera puede la inteligencia artificial beneficiar a la humanidad sin amenazar la ética ni el bienestar del planeta?”
Ai-Da y el Futuro del Arte Tecnológico
Ai-Da ha presentado sus obras en eventos prestigiosos, como la Bienal de Venecia y el Museo Ashmolean de Oxford, capturando la atención global. La artista robótica utiliza su modelo de lenguaje para elegir temas y dar forma a sus creaciones; por ejemplo, su interés en Alan Turing surgió de su capacidad de “conversar” sobre el tema antes de crear bocetos y pinturas preliminares que darían vida a la obra final.
Conclusión: ¿Arte o Tecnología?
La venta del retrato de Turing por Ai-Da establece un precedente en el mercado del arte y en el uso de la tecnología para ampliar los límites de la creatividad humana. A medida que la inteligencia artificial continúa avanzando, esta histórica subasta invita a la reflexión: ¿hasta dónde llegará la colaboración entre humanos y máquinas en la creación de arte?