Entre Susana Dosamantes y Ray Liotta
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La actriz Susana Dosamantes fue una de las grandes presencias que nunca pasaron inadvertidas en el género de las telenovelas
Un par de días después de la muerte de Fernando del Solar el jueves 30 de junio se dio la muerte también, por complicaciones del cáncer que sufría, de la primera actriz mexicana Susana Dosamantes.
Fue apenas el año pasado cuando criticamos en estas líneas el que sería su último trabajo de una prolífica trayectoria en el mundo de las telenovelas, ya que retomando el personaje que hizo inolvidable a la también fallecida Evangelina Elizondo en el clásico melodrama “Mirada de mujer”, de 1997, transformado en “Si nos dejan” para Televisa en el 2021. El trabajo que hizo ahí Susana Dosamantes salió a flote solo gracias a su colmillo en estas producciones, lo mismo al anterior de esta en el que retomó el que Marga López hizo en la también clásica “Lazos de amor”, de 1995, como la abuela de las trillizas que en su caso interpretó Angelique Boyer en “Tres veces Ana”, de 2016.
Sin embargo, a diferencia de Fernando del Solar, que brilló más en la pantalla chica en su faceta como conductor, Susana Dosamantes fue una de las grandes presencias que nunca pasaron inadvertidas en el género de las telenovelas desde la primera en la que participó, “Muchacha italiana viene a casarse” (1971), producción de Ernesto Alonso protagonizada por Angélica María y Ricardo Blume, hasta su primer gran antagónico, precisamente en la versión 1977 de “Corazón salvaje” en el personaje de Aimeé, que hizo la vida de cuadritos de la protagonista que también fue Angélica María, también producción de “El Señor Telenovela”, aterrizando su primer y no menos memorable protagónico al lado precisamente de Ernesto Alonso en “Aprendiendo a Amar” (1980).
A “Aprendiendo a Amar” le siguieron otros notables títulos en la década de los 80 bajo las órdenes de otros productores como Fernando Chacón en “Infamia” (1981), donde su galán fue Julio Alemán; Valentín Pimstein en “Amalia Batista” (1983), donde tuvo como galanes a Rogelio Guerra y Gregorio Casal; o Julissa debutando como productora en “Morir para vivir” (1989), al lado de los primeros actores Carlos Bracho y Otto Sirgo. En el nuevo milenio tuvo como sus mejores personajes, ya como primera actriz, el que hizo para Telemundo en el 2006 en “Marina”, refrito de “Los Ricos También Lloran” protagonizado por Sandra Echeverría y Mauricio Ochmann, y para Univisión en el 2010 en “Eva Luna”, protagonizada por Blanca Soto y Guy Ecker. Descanse en paz.
En notas más agradables, el viernes 8 de julio se estrenó en la plataforma de streaming Apple TV la serie basada en un caso de la vida real titulada “Black Bird: Confesiones de un asesino”, protagonizada y producida por el joven actor inglés Taron Egerton (“Kingsman”, “Rocketman”) como Jimmy Keene, un joven que en 1996 recibe una sentencia de dkies años en prisión por narcotráfico en los Estados Unidos, pero para reducir la condena recibe la oferta de obtener en una prisión de máxima seguridad la confesión del posible asesino Larry Hall (Paul Walter Hauser, de “El caso de Richard Jewel”).
Destacan entre los actores de reparto las presencias del nominado al Oscar Greg Kinnear (“Mejor ... “Imposible”) y el recientemente fallecido Ray Liotta, interprentado al padre de Egerton.
Comentarios a: sopeoperas@yahoo.com