¿‘Sin querer queriendo’? Teoría explica cómo personajes de El Chavo del 8 representan los 7 pecados capitales
COMPARTIR
Cada uno de los personajes de ‘El Chavo del 8’ tiene una peculiar personalidad que los hace resaltar en la colorida vecindad... pero ¿qué es lo que esconden detrás?
Con la bioserie de Roberto Gómez Bolaños en HBO Max, ‘Chespirito: sin querer queriendo’, se han despertado viejos chismes y críticas, rumores y... teorías que alimentan el suspenso del ‘detrás de cámaras’ de los populares programas creados por Chespirito, como ‘El Chavo del 8’.
Una de las hipótesis que más retumbaron en su momento, y que hasta el día de hoy ‘ponen la piel de gallina’, es sobre los icónicos personajes como Doña Florinda, La bruja del 71, Don Ramón y la Chilidrina, quienes representarían los 7 pecados capitales.
TE PUEDE INTERESAR: Esta es la lujosa mansión en Cancún donde ‘Chespirito’ vivió sus últimos días
Éstos son considerados capitales porque, según la tradición de la Iglesia católica, son el origen, raíz o fuente de muchos otros pecados.
LOS PERSONAJES DE ‘EL CHAVO DEL 8’ COMO LOS SIETE PECADOS CAPITALES
1. Ira:
La ira está asociada a una rabia intensa o enojo incontrolable, lo parece ser parte de la personalidad de la Chilindrina, interpretada por María Antonieta de las Nieves, quien se distingue por ser una niña lista y ventajosa, que obtiene siempre lo que desea manipulando a los demás.
Sin embargo, ante el mínimo rechazo o provocación, se desata su incontrolable enojo.
2. Soberbia:
Se define como el orgullo excesivo o vanidad. Es propio de una persona que se cree y siente superior a los demás. Esto encaja a la perfección con dos personajes: Doña Florinda, interpretado por Florinda Meza, y La bruja del 71 o Doña Clotilde, interpretado por Angelines Fernández.
En el caso de Doña Florinda, es claro que se siente por encima de los demás habitantes de la vecindad, a quienes llama la ‘chusma’. Mientras que La bruja del 71 se mostraba con un ato interés en su apariencia personal. Asimismo, en varios capítulos se observa cómo Doña Clotilde trata de una forma un tanto despectiva al protagonista, El Chavo del 8, interpretado por el mismísimo Chespirito.
3. Avaricia:
Como si falta describirlo... el único personaje que entra en las características del pecado de la avaricia es el Señor Barriga, interpretado por Édgar Vivar, quien se caracteriza con un deseo excesivo de riqueza y posesiones materiales.
Esto se representa, supuestamente, con el físico del personaje, ya que solía acumular riquezas sin compartirlas con otros, a excepción de su hijo ‘Noño’, interpretado por el mismo actor.
4. Lujuria:
Este pecado se define como el deseo sexual excesivo e incontrolado. Sí, hay unos cuantos personajes que podrían entrar en esta categoría.
En primer lugar, se tiene a Doña Clotilde que siente una intensa atracción hacia Don Ramón, interpretado por Ramón Valdés. Además, La bruja del 71 se refiere a su vecino de una forma seductora, agregando gestos sensuales.
Y, en segundo lugar, se posiciona la pareja de Doña Florinda y el Profesor Jirafales, interpretado por Rubén Aguirre. “¿No gusta pasar a tomar una tacita de café?”: era la icónica frase con la que Doña Florinda invitaba a su enamorado a su casa.
El público ha llegado a pensar que esta inolvidable frase cuenta con una insinuación en su trasfondo.
5. Gula:
La gula es el deseo excesivo de comida o bebida... claro que el público optó por denominar a Ñoño como el personaje representativo de este pecado capital, quien recurrentemente aparece con una torta de jamón y dulces.
El programa hace pensar al público que Ñoño solamente piensa en comer.
6. Envidia:
Así es. El único personaje apto para definir la envidia, es nada más y nada menos que el icónico Quico, quien tiene una personalidad divertida... hasta que presume sus pertenencias con El Chavo del 8 y Chilindrina, quienes tendrían una posición inferior.
En repetidas ocasiones, Quico se niega a compartir sus juguetes con los demás niños, a menos que tuviera algo de su interés a cambio.
7. Pereza:
La pereza se define como la falta de interés o esfuerzo y hasta negligencia en las responsabilidades. Así fue como el público definió al queridísimo Don Ramón, quien siempre se mantenía en problemas con el Señor Barriga, pues nunca le pagaba la renta.
Asimismo, a lo largo de los episodios se observa cómo Don Ramón se encuentra desempleado, aunque de vez en cuando sí logra conseguir algún trabajo. A pesar de ello, Ramón no hacía nada para solucionar su adeudo.
Entre los oficios que llegó a realizar, están peluquero, zapatero, albañil, ropavejero, fotógrafo, boxeador, vendedor de churros y vendedor de globos.
--
Pero cuéntanos, ¿tú qué piensas?