Rayones en la carcasa de aluminio, primer problema del iPhone 5

No hace ni una semana que el iPhone 5 está en las tiendas de algunos mercados. Los usuarios estadounidenses ya han podido adquirir las primeras unidades y los demás tendrán la opción de conseguir el nuevo dispositivo a partir de este mismo viernes 28 de septiembre. Año tras año, los primeros compradores de la nueva edición del iPhone nos sorprenden con sus comentarios y críticas.

Este año ha ocurrido lo mismo. Y es que algunos usuarios de este iPhone 5 han empezado a denunciar un problema estructural en el aparato. Y es que la carcasa de aluminio del dispositivo les ha llegado a casa con algunos defectos patentes a simple vista. El iPhone 4 fue la comidilla del sector con el famoso antennagate y el iPhone 4S se presentó con una larga colección de problemas a sus espaldas, directamente relacionados con la batería del terminal. En esta ocasión, la incidencia no es menos grave. Te contamos todo lo que ha ocurrido hasta la fecha, a continuación.

Está claro que no es normal recibir un dispositivo nuevo con defectos físicos de fábrica. Como puedes comprobar en la imagen superior, sacada del foro de MacRumors, el iPhone 5 tiene algunos rasguños en la parte de la carcasa que dejan al descubierto la parte metálica del aparato. Los usuarios que han emitido más quejas son los propietarios del modelo de color negro, puesto que han observado rasguños y golpes o abolladuras en los bordes biselados del aparato.

No se han detectado apenas quejas de propietarios del iPhone 5 en color blanco, seguramente porque se han vendido muchos más iPhone de color negro, siempre según las estadísticas no oficiales que por ahora se han dado a conocer.

El problema está, según los expertos, en que las superficies de aluminio anodizado son muy sensibles, quizá demasiado, de manera que están expuestas a sufrir un desgaste superior con el paso del tiempo y el uso diario.




¿Habrá equivocado Apple su estrategia?

Nadie puede estar satisfecho con el desgaste vertiginoso de un terminal que tiene un precio considerable aún en su versión más económica.

El aluminio, de hecho, es un material blando que puede albergar marcas de desgaste muy fácilmente. Para comprobarlo, bastará en hacernos con alguna pieza de este mismo material para comprobar que tras un uso continuado, las marcas de desgaste son más que frecuentes.

El problema está, en este caso, en que los bordes del teléfono son muy delgados, de manera que resulta relativamente fácil marcar la superficie sin querer.

Como siempre ocurre en estos casos, Apple todavía no ha hecho manifestación alguna. Y eso que los foros de Internet están repletos de usuarios quejándose de lo mismo.

Parece, sin embargo, que la compañía no tiene la menor intención de ofrecer explicaciones en este sentido, aunque si los problemas crecen, a la de Cupertino no le quedará otra que coger el toro por los cuernos.



Fuente: Tu Experto